La actriz Mena Suvari, conocida por sus personajes en American Pie y Belleza Americana, habló sobre su libro autobiográfico, The Great Peace: A Memoir, en el cual detalla una serie de agresiones sexuales que vivió desde los 12 años.

En conversación con el medio The Guardian, la intérprete reveló que fue abusada sexualmente a los 12 años por un amigo de su hermano mayor.

“No sentí tal pérdida del sentido de identidad hasta los 12 años, cuando me violaron”, señaló.

Todo partió porque en ese entonces Suvari quería encajar en un grupo, topándose con este tipo, que partió entregándole cartas de amor, para luego convencerla de iniciar su vida sexual.

Luego de lo anterior, los abusos fueron reiterados, y además, su agresor difundió rumores en su entorno, tratándola de “pu**”, según comentó. “Eso me chupó la vida. Creo que eso fue solo una confirmación excesiva de que nadie me iba a salvar, nadie iba a hacer nada por mí”, expresó.

También recordó cuando fue reclutada por una agencia de modelaje, allí conoció a un asesor de comerciales de 30 años con quien tuvo un fugaz romance cuando ella tenía solo 16 años.

“Lo que se me comunicó (en la agencia) fue que yo era un adulto, por lo tanto, puedo actuar como un adulto”, detalló.

Mena Suvari y pareja abusiva

Años más tarde, la actriz inició una relación con un ingeniero de iluminación, con quien también vivió episodios de abuso.

Suvari detalló que el hombre la obligaba participar en tríos sexuales. “Quiero que sepas que nunca quise hacer ninguna de estas cosas”, le comentó a una de las mujeres. “Él me dijo que tú querías”, le respondió.

“Eso me abrió los ojos sobre cómo estaba siendo manipulada y no tenía idea. Simplemente, las circunstancias me absorbieron”, explicó.

Incluso, contó que una vez tuvo que ir a un centro de salud tras tener sexo anal con su abusador. “No estaba siendo amada. Yo era solo un cuerpo, un receptáculo para sus deseos”, detalla en su libro.

Finalmente, sostuvo al medio que “nunca he querido hablar negativamente sobre cosas que pueden ser muy saludables para otras personas. No me dieron la opción o el permiso para hacerlo, y eso fue lo que fue tan destructivo para mí”.

“Es algo muy complicado cuando experimentas abuso sexual, porque parte de eso es… como satisfactorio. Pero la otra parte es una auténtica pesadilla, así que estás confundido, no sabes qué es lo correcto. Todo eso todavía me pesa porque nunca tuve la oportunidad de descubrirme de esa manera”, concluyó.