A mediados de julio de 2020, José Miguel Viñuela le cortó el pelo en vivo a José Miranda, camarógrafo de Mucho Gusto, sin su consentimiento.

Lo anterior generó una polémica y graves consecuencias para el equipo, ya que el animador terminó fuera del matinal y el productor ejecutivo, Pablo Alvarado, decidió dar un paso al costado.

Asimismo, el trabajador interpuso una demanda contra Viñuela por daños a su integridad física, a su imagen pública y a su honra.

Dicha acción legal no estaba orientada al canal con dirección en calle Vicuña Mackenna. Sin embargo, ahora la situación es distinta.

El medio La Voz de los que Sobran informó que Miranda decidió llevar a la justicia a la estación televisiva, luego que en febrero de este año, decidiera desvincularlo.

Recordemos que durante meses Miranda estuvo alejado de sus funciones, retomando en febrero de 2021, aunque aseguró sentir “el vacío y desprecio tanto de jefaturas como de los ejecutivos del canal”, informó el citado medio.

Despido por “necesidades de la empresa” y demanda

El 28 de febrero de este año Miranda fue notificado de su desvinculación por “necesidades de la empresa”, por lo que decidió llevar el caso a la justicia.

Cecilia Toro y Gabriel Acuña, sus abogados, señalaron que “esta desvinculación no es otra cosa que una represalia del canal por la demanda de indemnización de perjuicios interpuesta contra José Miguel Viñuela”.

Asimismo, también apuntaron a que dicha acción derivó en que el CNTV multara a Mega “por el trato indigno sufrido por nuestro representado”.

Adicionalmente, indicaron que detrás del argumento de “necesidades de la empresa” se “intenta ocultar las verdaderas razones de desvinculación enmarcadas en las represalias por haber ejercido sus derechos contra el rostro de canal, figura que le generaba réditos no menores al canal”.

Por último, los abogados expresaron que “durante los últimos meses, el trabajador experimentó el desprecio e indiferencia de los ejecutivos y jefaturas del canal, generando un menoscabo irreparable”.