Como es común en el matinal de CHV, todos los días sus reporteros se despliegan por la capital para conocer las distintas realidades que viven los vecinos.
Esta vez fue el turno de Lucho Ugalde de trasladarse hasta la comuna de Puente Alto, donde varias personas le contaron sus problemas.
Una de ellas fue Nataly, que más que contar su inconveniente, realizó una profunda -y también furiosa- reflexión en torno a la desigualdad que existe en el país.
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“Veía que estaban hablando del sueldo y yo creo que este país tiene mucho dinero”, partió señalando la mujer.
En esa misma línea, agregó que “los sueldos no pueden ser de 400 mil, tienen que ser de 600 mil pesos. Somos un país exportador. Perdón, pero podríamos tener el cuerpo más maravilloso que las venezolanas”.
La vecina criticó a la clase empresarial, señalando que ahora las personas prefieren emprender antes que trabajar con contrato, debido a los bajos sueldos que ofrecen.
“La gente no quiere trabajar en un país tomado por una clase empresarial, donde el empresario hace lo que se le pare el culo”, dijo.
“A este país, a los grandes empresarios, les conviene tener gente extranjera, porque el chileno no va a trabajar por la plata que vive el extranjero. Por lo menos yo sé cuánto vale mi trabajo, porque yo antes me pegaba el pique de aquí de Puente Alto a Lo Barnechea y llegaba con la comida avinagrada”, añadió.
En ese sentido se preguntó: “¿Por qué tengo que ir a trabajar tan lejos para ganar plata? ¿Por qué no puedo trabajar acá en mi comuna y estar cerca de mis hijas? ¿Por qué tanto sacrificio? ¡Paguen bien!”.
Ante la situación expuesta, hizo un llamado al presidente Gabriel Boric a que tome las riendas de lo que está sucediendo en el país.
“Tiene que ponerse las pilas, señor Boric y taparle la boca al gobierno anterior. Eso tiene que hacer”, indicó.
Asimismo, contó que trabaja en Coaniquem, “busco auspiciadores desde los 500 pesos. Es para una persona que no tiene. ¿Por qué el Estado no se hace cargo de eso? La Teletón la financiamos todos nosotros y la debiera financiar el Estado”.
Sueldos de diputados y conductores de TV
Nataly estuvo hablando en extenso en el matinal, tanto así que los animadores, Monserrat Álvarez y Julio César Rodríguez, escuchaban atentos sus palabras, al tiempo que las personas en el despacho aplaudían cada intervención.
En su elocución, también se refirió a los retiros del 10% y a los irrisorios sueldos de los diputados, incluso de conductores de TV.
“¿Por qué la gente tuvo que sacar plata de sus fondos? Porque el Estado no llegó a tiempo, porque este país tiene plata, pero le paga a un diputado… (…). Mira, por ejemplo, y no es por ofenderlos a ustedes porque a mí su programa me encanta, pero no puede ser que en este país puedan pagar a los conductores (de televisión) sueldos exacerbados, no se puede”, expresó.
Tras su relato, el animador indicó que “las personas que ganan más tienen que ponerse más a través de los impuestos. El problema está en que algunos no pagan, algunos evaden, hay empresas que tienen miles de utilidades y solo quieren pagar el sueldo mínimo. Entonces, por eso recojo tus palabras también”.
Finalmente, sostuvo que en este país “tienen que pagar bien e invertir. Yo voy a empezar un emprendimiento porque ya estoy cansada de trabajar y así estoy más cerca de mis hijas”.
Atendió a Cubillos y Morel
Durante su intervención también contó que cuando trabajaba en la zona oriente de la capital, le tocó atender a la exprimera dama Cecilia Morel, y a Marcela Cubillos.
“Yo atendí a la Marcela Cubillos. Ojalá, señora Cubillos, se acuerde de mí. Cuando entraba a la tienda yo le decía ‘buenas tardes, señora, bienvenida’. ‘Voy a mirar’, me decía, no me dejaba ni siquiera saludarla y me tiraba su cargo encima”.
Agregó que “yo tenía que venir, bajo perfil, entraba al probador y le planchaba una camisa. Y después salía con mi mejor cara a atenderla. Después que la atendía bien, me daba las gracias”.
También comentó otra situación vivida con Morel. “Una vez me tocó atender a la mujer de Piñera en Carolina Herrera, iba escoltada, ni siquiera le podía hablar”.
Finalmente, reflexionó: “Entonces uno dice por qué la gente te trata al ver como uno anda. ¿Por qué? Si acá somos todos iguales. Todos hacemos lo mismo. Mi mensaje es ese, por lo que me ha tocado vivir: creo que debe haber una fiscalización a los empresarios”.
