En la noche del viernes, Juan Pablo Queraltó conversó con el programa de Mega Modus Operandi, en donde recordó la violenta encerrona que protagonizó en 2019.
Según declaró el periodista, el delito, el cual sucedió luego que saliera de su casa en Chicureo en dirección a la Ruta 5 Sur, lo cambió radicalmente. “Estuve entre la vida y la muerte”, dijo.
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Siguiendo con su relato, el comunicador comentó que “estaba hablando por el sistema de Bluetooth del auto con mi papá (…) Cuando veo que los delincuentes se cruzan, veo bajar a cuatro personas”.
“Yo me pongo a gritar, pero se me fue la voz para adentro. Le digo a mi papá: ‘¡Me van a robar el auto!’, el teléfono queda al interior del auto”, afirmó.
Además, agregó que “atino a abrir la puerta, veo a los gallos al frente, acá veo a otro con la pistola y a otro lo veo allá. No sé por qué, yo decido abrir la puerta, me bajo, me devuelvo para tomar el teléfono y ahí es cuando uno de los delincuentes me pega con la cacha de la pistola en la cabeza, pesca el teléfono y lo tira al interior del auto”.
“Me caigo al piso, siento que me doy vueltas hacia atrás, empiezo a sentir patadas en las costillas, un tipo apuntándome”, complementó.
El difícil episodio de Juan Pablo Queraltó
En ese momento, detalló el animador, fue auxiliado por un médico que pasaba por el lugar, luego de quedar solo en la calle.
Según expresó Juan Pablo Queraltó, pese a que el GPS de su celular llevó a Carabineros a un galpón en Puente Alto, el cual estaba lleno de vehículos con encargo por robo, no pudo encontrar el suyo.
En esa misma línea, el presentador explicó que debido a que las cámaras de seguridad estaban apuntando a otra dirección durante la encerrona, no se logró ubicar a los responsables, por lo que hasta el momento no hay detenidos.
“Ver que una persona te está apuntando con un arma, pensar en la familia que uno tiene, hijos, mujer, uno podría haberlo perdido todo por una locura de un delincuente de haberme pegado un balazo, con el objetivo de llevarse un bien material”, cerró.
