Una de las duplas que se tomó el especial madres e hijos de La Divina Comida de este sábado, fue Nicolás Larraín y su madre, Sonia de Toro.

Ambos protagonizaron varios entretenidos momentos durante la noche, en los que compitieron por ser los mejores anfitriones con Claudia Pérez y Daniela Muñoz; y Sonia Fried, alías la “Tía Sonia”, y Stefano Massú.

Lo primero que llamó la atención de los televidentes ocurrió en la casa de Stefano Massú, cuando jugaron una dinámica para saber cuánto conocían a sus hijos (grupo de sangre, fecha de cumpleaños, entre otras preguntas) y la madre de Larraín no acertó con ninguna respuesta.

Posteriormente, fue el turno de los conductores del programa radial Liberen a Nicolás, quienes se robaron la atención por no congeniar en la cocina y protagonizar diversos fracasos culinarios.

Pese a usar una olla inteligente, los Larraín no se ponían de acuerdo en seguir las recetas y terminaron por servir una salsa dura en el aperitivo, frieron panqueques en una sartén vieja y prepararon un desastroso (y bastante líquido) postre de tiramisú.

Revisa algunas reacciones de los televidentes: