En todo un fenómeno de Netflix se ha transformado la serie surcoreana, El Juego del Calamar (Squid Game). Ni siquiera el co-CEO de la plataforma de streaming se esperaba el éxito arrollador de la producción.

“No lo vimos venir, en términos de su popularidad global”, dijo Ted Sarandos, en una conferencia que recoge la revista estadounidense Variety. Allí también el ejecutivo agregó que la serie va camino a convertirse en la serie más vista de su historia.

Y es esta misma popularidad la que generó un impensado problema a un hombre, cuyo teléfono no para de sonar, producto de un descuido de la serie del momento.

Recordemos que El Juego del Calamar trata de un grupo de personas con serios problemas económicos, que participan de un misterioso concurso en el que deben someterse a diversos juegos infantiles. Si no los logran superar con éxito, son eliminados, pero de una manera literal.

Para sumarse al juego los participantes reciben una tarjeta con símbolos por un lado (triángulo, cuadrado y círculo) y por el otro, un número de teléfono, al que los aspirantes deben llamar.

Esto último fue lo que generó un verdadero dolor de cabeza para una ciudadana de Seúl, capital de Corea del Sur, ya que el número que aparecía en la tarjeta, en una de las escenas, era real y ahora no para de recibir llamados.

El error

Obviamente que todo se trató de un error, informa el sitio Koreaboo, ya que en lugar de censurar los últimos tres dígitos, lo hicieron con los tres primeros.

Resulta que los tres primeros números corresponden al código de ciudad en Corea, por lo que fueron muchos que antepusieron el 010, correspondiente a Seúl, para que comenzara el infierno de la “víctima”.

el juego del calamar
Netflix

“Después de que El Juego de Calamar fue emitida, he recibido llamadas y mensajes de texto sin parar, 24/7, al punto de que me es difícil continuar con mi vida normal. He estado usando este número por más de 10 años, pero estoy a punto de cambiarlo”, dijo la persona que fue identificada con el apellido Kim.

Me llegan unas 4000 llamadas por día. No me di cuenta de lo que estaba pasando porque no he visto la serie. Me lo dijeron en una de estas conversaciones”, agregó, indicando que la producción le recomendó cambiar de número, algo a lo que ella se resiste, por el problema que le significaría con su agenda.

De hecho, la mujer sugirió al periódico local Chosum, y que consigna Infobae, que le habrían ofrecido una compensación económica, cifra que en un principio era de 1 millón de wones (poco menos de mil dólares aproximadamente) y que luego ascendió a 5 millones. Pero no aceptó.

“Tanto Netflix como Cyron Pictures son conscientes del problema e intentaremos resolverlo”, se excusaron desde la plataforma, mientras que la afectada La persona presentó una demanda contra el creador de la serie, Dong-hyuk Hwang, y pidió a los fanáticos de la serie que dejen de molestarla.