Este lunes después del partido Chile-Argentina por la Copa América, se estrenará la esperada teleserie nocturna de Canal 13 La torre de Mabel.
La ficción que transita por el género del drama y la comedia, será protagonizada por Paloma Moreno, Blanca Lewin, Elisa Zulueta, Álvaro Espinoza, Ignacia Baeza y Álvaro Gómez.
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En este contexto, una de las novedades que incluirá este potente elenco, será la incorporación de la joven actriz Camila Roeschmann, a quien conocimos en 2016 en la teleserie de TVN La Poseída.
Actualmente tiene 27 años y durante todo este tiempo, la actriz se ha dedicado a trabajar en proyectos de teatro, cine y también cursó estudios en el extranjero.
Y es que cuando Roeschmann trabajó en La Poseída, todavía estaba en la escuela de Teatro de la Universidad de Chile. Le quedaba un año, el que terminó cursando en dos. Luego se fue a estudiar a Cuba y Nueva York y participó en la serie 12 días que estremecieron Chile y otros proyectos audiovisuales como el cortometraje Por mí y por todas de Manuela Burr.
Sobre este regreso a las teleserie conversamos con Camila en Página 7.
La actriz dará vida al rol de ‘Isabel Fuentes’, una joven introvertida, sensible y que ha sido abandonada por sus padres y vive con unos parientes que solo le dan comodidades pero poco y nada de afecto.
En este camino, Isabel volverá a encontrarse con su pasado y estará cerca de descubrir verdades que la podrían hacer cambiar por completo. Además, compartirá escenas de corte amoroso con el personaje de Renato Jofré, ‘José Tomás Mondaca’.
Sobre cómo llegó a esta producción, Camila señaló a Página 7 que en 2019 asistió a un casting presencial, siendo el último al que fue, producto de la pandemia.
“En esa ocasión, me encontré con amigas y compañeras actrices, muy talentosas y trabajadoras, no estaba fácil quedar“, sincera la actriz, agregando que como intérpretes siempre es complejo hacer el ejercicio de “encontrar el tono del proyecto sin tener tantos antecedentes de éste en una primera audición”.
En este caso en particular, Roeschmann comentó que en el casting jugó a ser una adolescente y se le ocurrió incorporar algunos elementos al look que -curiosamente- se quedaron en el personaje de Isabel.
“Me puse un pañuelo en la cabeza y un aro en la nariz, un look muy lejano a mí, una cadencia y soltura más de alguien de 17 años. Fue interesante porque al quedar y hacer el personaje, lo del aro y el pañuelo quedó como look de ‘Isabel’, una coincidencia o quizás también incorporaron mi propuesta“, comentó.
Respecto a cómo ha sido su vínculo con Renato Jofré, la actriz señaló que es primera vez que le toca compartir ‘escenario’ con él, pero desde el primer momento todo ha fluido entre ambos.
“Me acuerdo que una de las primeras veces que estuvimos juntos en el set, se sentó al lado mío y me dijo algo como: ‘ya, conozcámonos, conversemos’. Fue muy dulce de su parte porque me sentí muy cómoda, nos gustaba repasar las escenas antes para irlas probando y habitando, y bueno, poco a poco, nos fuimos conociendo, hablando del oficio y la vida”, afirmó.
En esta teleserie, Camila se encontrará con Ignacia Baeza, actriz con la que compartió en La Poseída, y si bien no estarán en muchas escenas juntas, la actriz tiene una opinión muy clara sobre su colega.
“La Ignacia es realmente una actriz muy apasionada, intensa, con una energía especial que cada vez que entraba al set era como que se llenaba de su presencia. No tenemos tantas escenas juntas, pero sí cuando nos encontramos tenemos una relación torcida, que comienza muy bien y luego se llena de sospecha y tensión“, destacó.
Roeschmann también contó que nunca había trabajado con el resto del elenco, apenas con Marcial Tagle cruzó algunas escenas en otra producción pero “el grueso de mis compañeros fueron un descubrimiento”.
En esa línea, agregó que si bien es un tanto “tímida”, poco a poco fue sintiéndose más cómoda y en confianza con el equipo.
“Poco a poco fui entrando y acercándome, generando lazos, conversando y compartiendo café, sobre todo en los largos momentos entre escenas y tanto con las actrices y actores como también con quienes están detrás, como las maquilladoras, los encargados de pelo, arte, producción. Feliz volvería a trabajar con este grupo para ir generando cada vez más experiencias juntos”, reconoció.
Grabando con protocolos
La torre de Mabel se grabó el año pasado bajo estrictos protocolos sanitarios cuando la pandemia estaba desatada en nuestro país. De hecho, las grabaciones concluyeron en noviembre pasado y entremedio hubo varios meses que la producción estuvo paralizada producto del coronavirus.
En este contexto, Camila señaló bien la situación estaba compleja por la pandeia, “fue un alivio volver a trabajar”, pues para ella “lo más raro o complicado fue la constante incertidumbre de si íbamos a poder seguir o no, si nos iban a encerrar otra vez. Ese estado de incertidumbre que, además, muchos trabajadores lo han sentido con esta situación”.
En cuanto a los protocolos, indicó que éstos se integraban a la hora de grabar. “Nos testeaban regularmente a todo el equipo, un uso meticuloso de la mascarilla, en el set nos la sacábamos sólo quienes actuábamos y estaba llena de maquillaje que debían retocarnos e intentábamos mantener cierta distancia, pero es difícil al tener que interpretar una escena con otro”, sostuvo.
