Los dibujos de Pepe Le Pew en los Looney Tunes comenzaron a ser transmitidos desde 1945. Ahí se mostraba a un zorrillo que hacía todo lo posible por seducir a una gatita que solo intentaba huir de él.
Más de 70 años después, el personaje recibió duras críticas tras ser acusado de “normalizar la cultura de la violación”. Todo partió cuando el columnista de The New York Times Charles M. Blow anunció que seis libros del Dr. Seuss (el mismo detrás del ‘Gato del sombrero’ y el ‘Grincgh) dejarían de ser publicados por tener contenidos racistas en material dedicado a niños.
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Dentro de su nota, hubo un especial párrafo dedicado al zorrillo animado: “Los blogs de RW están enojados porque dije que Pepe Le Pew se sumaba a la cultura de la violación. Veamos. 1. Agarra / besa a una chica extraña, repetidamente, sin consentimiento y en contra de su voluntad. 2. Ella lucha con todas sus fuerzas para alejarse de él, pero él no la libera. 3. Cierra una puerta para evitar que ella se escape”.
La crítica tomó otros niveles cuando el columnista aseguró que el personaje “ayudó a enseñar a los niños que ‘no’ en realidad no significaba no, que era parte del ‘juego’, la línea de partida de una lucha por el poder. Enseñó que superar las protestas, incluso las objeciones físicas de una mujer, era normal, adorable, divertido. Ni siquiera le dieron a la mujer la capacidad de HABLAR”.
Esto desató una ola de comentarios donde muchos televidentes exigían la salida del personaje de los catálogos de episodios de Looney Tunes. Fue ahí que la producción a cargo de Space Jam: A New Legacy, donde los dibujos animados volverán a jugar basquetbol pero con LeBron James, confirmó una importante noticia.
This helped teach boys that “no” didn’t really mean no, that it was a part of “the game”, the starting line of a power struggle. It taught overcoming a woman’s strenuous, even physical objections, was normal, adorable, funny. They didn’t even give the woman the ability to SPEAK.
— Charles M. Blow (@CharlesMBlow) March 6, 2021
Y es que si bien Pepe Le Pew estaba considerado para algunas escenas, se determinó que finalmente no aparecerá en la secuela de Space Jam.
Sin embargo, esto no tendría estricta relación con lo publicado en The New York Times. Esto porque cuando hubo un cambio en la dirección y Malcolm D. Lee asumió la película, este decidió sacar una escena donde el zorrillo sería el protagonista.
La idea era mostrarlo como un barman mientras Bugs Bunny y Lebron buscaban a Lola. Ahí contaría que la gata Penélope había interpuesto una restricción contra él, lo que daría paso a que James le dijeran que no podía tocar o besar a las mujeres sin su consentimiento.
De esta forma, el cambio no sería tras la publicación de la columna, pero de todas forma calzó justo con la viralización de esta.
