Este jueves la teleserie Verdades Ocultas mostró una nueva muerte, la que involucró a algunos de los personajes principales de la historia.
Preocupada por el estado de Rocío, Julieta decidió ir a buscarla junto a Diego, tras perder la señal de su teléfono.
Ambos llegaron hasta la casa de la mano derecha de Leonardo, Gabriel, el último lugar donde la hermana de Samanta supo que estuvo la abogada.
Ella decidió entrar, pero no contaba con que él estaría adentro, lo que generó un momento muy tenso.
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Gabriel la apuntó con su arma y al ver el peligro que corría, Diego decidió intervenir, pegándole dos tiros en el pecho.
Gabriel murió ante los ojos de ambos personajes.
Mientras Diego consolaba a Julieta, quien estaba muy asustada e impactada con la situación, llegó Rocío, a quien el abogado le pidió una explicación sobre lo que estaba sucediendo.
Pero ella no dio respuesta y solo les pidió que salieran de la casa y les dijo que no llamarían a la policía, porque “aquí no ha pasado nada”.
Cuando lo hicieron, Rocío comenzó a sacar las cámaras que Leonardo instaló en la casa. Mientras lo hacía él la llamó y le recomendó que para borrar todas las evidencias, como las huellas de Julieta y Diego, debía quemar la casa.
“Es el fuego o la cárcel para los tres. Tú decides”, le dijo Leonardo, agregando que en la despensa había bidones de acelerantes, lo que bastaría para quemar todo.
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