A principios de diciembre se dio a conocer la salida de Cristián Sánchez de TVN, señal donde trabajó durante cuatro años.
De acuerdo a un comunicado del canal, la renuncia del animador se debía a que quería enfocarse en otros proyectos que le permiten equilibrar su vida familiar y laboral. Y así ha sido.
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Este último tiempo Sánchez ha estado enfocado en su familia y ahora está pronto a estrenar una nueva temporada de Nexo en ESPN, programa que mezcla el deporte y la entretención.
En una entrevista con La Tercera, el conductor habló sobre cómo ha sido este mes fuera de la TV, la difícil decisión de dejar la señal público en medio de la crisis social y reflexiones sobre su carrera.
Respecto a la diferencia que hay entre programas de la televisión abierta y el cable, Cristian señala que en ambos se trabajan muchas horas y existe un esfuerzo tremendo del equipo, pero que en este último hay mayor liviandad.
“Los programas que se hacen en el cable tienen esa soltura y liviandad, y ese desparpajo del amateurismo que me encanta. O sea, esa cuestión donde hay pocos recursos en cada nota y en cada cosa que se hace, que depende de la creatividad. Además, el equipo nuestro es muy joven, entonces como que aún están en formación. No están maqueteados”, comentó.
Pese a esto, Sánchez deja claro que Nexo es su único proyecto en ESPN y no aspira a concretar otro, pues no quiere caer en la sobreexigencia que él mismo impuso.
“Durante un par de años me sobrevendí y me reventé, y la verdad es que ha sido tan rico este período. El hecho de que con la Diana (Bolocco) nos tomamos tres semanas de vacaciones con los niños, donde siempre tuvimos vacaciones medias raras, porque en algunas semanas tuve que ir a hacer el Festival de Olmué o un evento importante. Era una semana con el nervio de que viene este festival o el de Talca. Entonces era una semana de vacaciones, pero preocupado. Creo que eso obedece a ese alcachofazo de preocuparte de lo importante. Hubo un tiempo en que me sobrevendí y reventé, estaba haciendo tres programas diarios. Como que todo eso fue muy loco y ahora me estoy preocupando de lo importante, de hacer lo que me gusta, de hacer algo en lo que lo paso bien, donde me siento querido y respetado”.
En cuanto a su salida de TVN, Cristian afirmó que “necesitaba parar” y que ahora tiene una “sensación permanente de felicidad, de estar con mis niños”. Eso sí, no fue una decisión fácil de tomar.
“Son decisiones en las que tiene que participar no solo uno, ya que uno involucra a todo tu grupo cercano. Fue rico y lindo cuando la Diana me dice ‘dale, obvio que sí, tienes que parar’. Seguramente, ella tampoco me veía bien ni feliz, entonces obvio uno tiene que parar. Uno tiene que, entre comillas, reconocer que tienes que retroceder dos para avanzar tres. Y no lo veo como retroceso, al contrario, es pura ganancia”, agregó.
En este sentido, el animador descartó que la decisión la haya tomado por los cambios que se llevaron a cabo tras el denominado “estallido social”, indicando que era algo que venía de hace ya un tiempo.
“Decirle que no, justamente en este escenario, a un muy buen trabajo, no es fácil, es bien duro. Forma parte de una conversación con la familia, con mi mujer. No es cosa de llegar y decir ‘oye, voy a prescindir de esta pega’, que también me gusta mucho. Pero creo que me enfoqué, me preocupé de estar bien yo. Creo que me había abandonado un poco, me faltaba un frenazo violento”, expresó.
Por último, el conductor afirmó que no iba a opinar sobre cómo los matinales han tratado el tema de la crisis, porque él recién venía saliendo de uno. “Sería muy soberbio de mi parte comentar o predicar, yo estoy fuera así que no diré nada”, concluyó.
