El próximo viernes el Gran Rojo coronará al primer lugar tanto en categoría cantantes como en bailarines. Son ocho participantes los que quedan, pero sólo dos alcanzarán el premio de 10 millones de pesos, pero más importante, el honor de convertirse en el mejor de los mejores.
Y como todo ciclo que se cierra viene la hora de los balances, algo que desde TVN, al parecer, ya hicieron, puesto que antes de terminar la competencia, ya confirmó que habrá una quinta temporada, que comenzará en marzo de 2020, una noticia que puso feliz a una de sus principales pilares: Maitén Montengro.
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Para quienes no recuerdan, desde la primera temporada de Rojo, Fama Contrafama que la ‘Maestra’ está vinculada al programa, ya que su academia en Miami era el premio para los ganadores. “Soy parte de Rojo desde siempre”, señala Maitén a Página 7.
“Estoy contenta de que el programa siga el próximo año. Es un aporte a la juventud, al nuevo talento, que existan programas artísticos diarios”, confiesa la presidenta del jurado, quien aún desconoce si será parte o no del espacio de talentos, durante el próximo año.
“No hemos conversado de planes, pero mi corazón siempre estará y pertenecerá a Rojo. Me siento parte de estas temporadas y de lo que hemos podido construir, esté o no esté más adelante“, sostuvo la ‘Maestra’.
Evolución de participantes
¿Cuál es el balance que hace Maitén respecto a su participación en el Gran Rojo? “La labor de ser jurado no es fácil, es ‘poco popular’, pero tratamos de profesionalizar un don. Los bailarines tal vez dieron más resultados por momentos“, confiesa y entrega sus argumentos.
“Creo que los bailarines tienen una consciencia mayor de lo que significa ser versátil y eso significa estudiar y tomar clases de estilo bien diferentes. El cantante no tiene mucho eso y se apoya mucho en lo que le gusta cantar y no tienen la misma mirada que el bailarín”, sostuvo.
Respecto a quién de los participantes ha experimentado una mayor evolución, Montenegro no quiso dar nombres, ya que “sugeriría ya estar claros y aún se la están jugando. Hay varios pero al mismo tiempo, no sé si por juventud o madurez, son intermitentes“, indicó, añadiendo que en ese sentido, los cantantes han mostrado más avances.
“Tal vez por ser los menos preparados, los cantantes han mostrado notoriamente más evolución en escena, pero un artista es una pieza única, eso es lo que hará mantenerse. Ganar un concurso es una cosa valiosa, pero permanecer es lo más difícil”, confesó.
Por último, brindó palabras para los participantes que están ad portas de la final: “No se trata sólo de cantar o bailar, sino que se trata de tener herramientas para enfrentar una carrera que cada día pone más pruebas profesionales. Para mí un artista es un comunicador de emociones“, cerró.
