Carolina Molina, más conocida como ‘la Rancherita’, vivió una extrema y compleja situación en su visita a Chile. Todo ocurrió en medio de la grabación del videoclip de uno de sus últimos singles, que fue grabado en las afueras de Santiago.

La cantante, que vive actualmente en México, aprovechó que tenía un descanso de sus presentaciones por el Día del Padre, para grabar el video de su tema Lejos de mi vida. Si bien pudo capturar imágenes de alguna paradisíaca playa del Caribe, Carolina prefirió tener como paisaje al Cajón del Maipo.

Para esto se trasladó al sector de Baños Morales junto con su equipo. El problema fue que debido a las condiciones del terreno, que estaba rodeado de nieve, quedaron atrapados en la zona precordillerana.

“Nos pasó de todo, hubo un momento complicado, pasamos susto. Pero gracias a Dios estamos todos bien. Gracias a los rescatistas que fueron a sacarnos de la cordillera”, fue el mensaje que compartió la cantante en su Instagram, pero fue con el diario La Cuarta que contó muchos más detalles.

Aún recuperándose de una otitis y con la garganta inflamada, ‘la Rancherita’ relató qué fue lo que pasó: “El tema de las cadenas (se rompieron) hizo que se nos enterrara la camioneta y no podíamos salir. Al principio era todo risas y sin mayores preocupaciones, pero cuando ya habían pasado cuatro horas y el combustible se comenzó a acabar fue que nos preocupamos, porque sin bencina se apaga todo y nos quedaríamos sin calefacción”.

Según contó la cantante, las horas pasaban y nada podían hacer. El frío y el miedo comenzó a ser un factor que desesperó a todo su equipo: “Empezó a bajar mucho la temperatura (…) Incluso pensé que podría haber muerto de hipotermia. Cayó la noche y sin calefacción la cosa se puso negra”. De hecho, pasaron todo el rato con los autos encendidos, lo que consumió rápidamente la bencina.

Al final, fue el instructor de montaña que los acompañaba el que fue hasta un pueblo cercano para conseguir ayuda. Horas después llegó con unas camionetas que los ayudaron a salir de ese complejo escenario.

“Fueron como cuatro horas que estuvimos morados. Teníamos miedo que el instructor quedara atrapado en la nieve. Pasamos un gusto grande”, cerró ‘la Rancherita’.


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