La actriz Natalie Dormer, conocida por su rol de Margaery Tyrell en Game of Thrones, reveló que se convirtió en madre por primera vez en enero pasado.

La británica compartió la noticia en el podcast That’s After Life!, donde detalló que dio a luz a una niña y que, hasta ese momento, solo sabían familiares y amigos más cercanos.

“Es lo mejor que se puede hacer durante una pandemia: quedarte embarazada, tener un bebé (…) Siento que estoy siendo un poco cliché, probablemente ella estará sentada en un bar dentro de 30 años diciendo: ¡Sí, soy un bebé COVID!”, bromeó.

Natalie contó que su hija tiene solo tres meses y que “es una alegría absoluta”, aunque le ha afectado la falta de sueño que conlleva tener una bebé recién nacida, según consignó US Weekly.

“Nunca más me voy a quejar de las horas de rodaje, porque la falta de sueño es otra cosa”, comentó la actriz, aunque señaló que está “absolutamente enamorada” de su hija.

Respecto a la compatibilidad de la maternidad con su trabajo, Dormer indicó que cree que se la hará “muy difícil” retomar su vida laboral, agregando que no quiere que su carrera afecte la infancia de su hija.

“La gente en la industria en la que estoy se apoya en las niñeras y lo hacen para una razón: para poder llevar a los niños con ellas. Para mí, este es el momento perfecto para volver al escenario, porque entonces podría estar con ella todo el día, pero con el COVID quién sabe cuándo sucederá”, expresó.

La hija de Natalie Dormer es fruto de su relación con el también actor David Oakes (The White Queen, Victoria), a quien conoció en 2017 tras participar en la obra de teatro Venus in Fur.

En ese momento la también actriz de Los juegos del hambre estaba comprometida con el director y productor irlandés Anthony Byrne. Su relación se terminó en 2018 y un año después Dormer y Oakes confirmaron su romance.