De actriz de Disney a Princesa del Pop en los ’90, Britney Spears ha tenido una icónica carrera al estrellato. Sin embargo, este ascenso tuvo una estrepitosa caída que se vio reflejada en 2007.

Adicciones, divorcio, lucha por la custodia de sus hijos, acoso de paparazzis, hizo que Spears fuera internada en varias ocasiones y fue en ese momento que su padre decidió colocarla bajo su tutela temporal.

Sin embargo, tras 12 años de aquel episodio, la cantante, de 38 años, todavía sigue bajo la custodia de James Spears.

Este tipo de mecanismos es legal en Estados Unidos para las personas que tienen sus capacidades mentales mermadas por problemas como la demencia.

¿Qué no puede hacer Britney? Según indicó La Vanguardia, la cantante no puede manejar su dinero, tomar decisiones sobre su música, contratar a un abogado, votar, conducir un auto, casarse, incluso ver a sus hijos, sin la expresa autorización de su padre.

#FreeBritney

Por esta razón, los fanáticos de la cantante pop instalaron -nuevamente- el hashtag #FreeBritney (Liberen a Britney), un movimiento virtual que pretende apoyarla para que retome el control de su vida y sus finanzas.

Esta “iniciativa” comenzó en 2019, según consignó Huffington Post, luego de que se filtrara una declaración ante el juez en que la cantante afirmaba que había sido internada en contra de su voluntad.

Según indicó Diet Prada, la cantante paga más de un millón de dólares en tasas para mantener la tutela. Además, paga 100.000 dólares a su padre como sueldo y otra gran cifra a un abogado que ella no eligió.

En tanto, se espera que durante julio la artista pueda revisar la tutela, la que sus fans piden apoyar a través del movimiento #FreeBritney y firmando una petición que crearon en change.org.