Tras su salida de la realeza británica, el príncipe Harry y Meghan Markle se mudaron a Los Ángeles, Estados Unidos, para llevar una vida más tranquila. Sin embargo, actualmente estarían preocupados por su seguridad.
Según consigna el sitio ET, se han registrado drones volando sobre la casa del duque y la duquesa de Sussex. “No saben quién los está dirigiendo. Asumen que probablemente sean fotógrafos, pero no pueden estar seguros”, señaló una fuente cercana a la pareja.
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En este contexto, Meghan y Harry han llamado en reiteradas ocasiones a la policía local, debido a estos avistamientos sobre su hogar, en el área de Beverly Ridge.
Asimismo, reveló que Meghan ha recibido amenazas racistas anteriormente, por lo que la situación les preocupa. “Es realmente espeluznante que la gente pueda estar tomando fotos. Sienten que están siendo invadidas”, precisa.
“Es especialmente aterrador cuando están afuera con Archie. Es realmente aterrador”, comenta sobre la pareja que tendría la intención de contratar un equipo de seguridad privado para prevenir estas amenazas.
Cabe señalar que actualmente la familia se encuentra en cuarentena, y centrados en sus obras de caridad. “Están disfrutando del tiempo con Archie”, dijo la fuente a ET.
“Creo que están disfrutando del encierro y el hecho de que han podido tomarse un respiro”, añadió finalmente sobre la nueva vida de la pareja.
