Sí, son de la realeza pero eso no quiere decir que no tengan derecho a disfrutar de una tarde de esparcimiento como cualquier otra persona ¿cierto?.
Pues bien, Kate Middleton (37) quiso probar que tienen los mismos intereses que otra persona común y corriente y recientemente fue a un pub de Londres para beber unas copas con algunas madres del curso de su hija Charlotte, del colegio Thomas Battersea.
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La duquesa de Cambridge llegó hasta el Hollywood Arms, con sede en Chelsea, para participar de una reunión reunión social con varias madres con el objetivo de conocerse, pero como el asedio de la prensa es habitual con las figuras de la realeza, decidió entrar por un acceso secreto y así también evitar a cualquier “curioso” con teléfono.
Lo curioso de este dato es que según el medio inglés The Sun, esta misma entrada se habilitó para el uso del príncipe Harry en sus días de soltero.
Este bar tiene una historia con la familia real británica, puesto que sus antiguos dueños, Willow Crossley y su esposo Charlie, quienes lo vendieron en 2015, ayudaron a realizar los arreglos florales para la boda del príncipe Harry y Meghan Markle.
Este discreto recinto es popular por sus asados de domingo y almuerzos de fin de semana, reuniendo a menudo a personas pertenecientes a la alta sociedad de Chelsea.
Y al parecer el truco de Kate funcionó tan bien que no logró ser detectada, ya que esto fue hace un mes y recién se hizo pública su visita a uno de los salones privados del pub cuyo arriendo por evento bordea los 2,5 millones de pesos chilenos y puede albergar a cerca de 80 personas.
Sumado a este cotidiano actuar, hace poco se le vio buscando disfraces de Halloween en una tienda de Sainsbury en Norfolk, lo que ha provocado una reacción positiva en la gente pues le da un aura más popular.
Recordemos también que los pasajeros de Flybe se sorprendieron cuando Kate y su familia abordaron un vuelo económico desde Norwich a Aberdeen para visitar a la Reina en Balmoral.
Cabe señalar que la princesa Charlotte (4) entró al colegio en septiembre pasado, sumándose a su hermano mayor, el príncipe George (6) quien ha estado asistiendo desde 2017.
