Hace algunos días concluyó el viaje a Sudáfrica de Meghan Markle y el príncipe Harry, el cual obviamente no estuvo exento de críticas, sobre todo por la reciente demanda judicial que entablaron los duques contra el medio británico Mail on Sunday.
No obstante, uno de los aspectos que siempre llama la atención en la exactriz es la elección de sus atuendos, puesto que en esta ocasión se cambió varias veces de ropa pero las elecciones estuvieron lejos de alcanzar un valor tan estratosférico como las que tuvo en su gira del año pasado por Oceanía.
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En esta ocasión, la atención estuvo centrada en el estilo de sus vestidos, pues por lo general todos fueron de estilo o corte camisero. Desde el vestido azul que lució en su primera jornada hasta el que usó para despedirse del país, en la cita que tuvo con el presidente de Sudáfrica y su esposa.
En total fueron siete diseños con cinturón y botones en el frente de las prendas, por lo que varios se preguntaron si existía alguna razón particular para repetir el estilo, y de acuerdo al sitio británico Express, sí la hay ¡Y es adorable!
Lo anterior porque el motivo tendría que ver con Archie Harrison y su alimentación. Y es que el pequeño tiene apenas cinco meses, por lo que la lactancia materna es su única alimentación y evidentemente una pieza de ropa que se pueda abrir en el frente es lo más fácil y cómodo para amamantar.
Además, Meghan también reconoció sentirse afortunada y agradecida de que todos los compromisos reales de la gira se hayan organizado en torno a la alimentación de su retoño, pues en estos momentos para ella lo más importante es la tranquilidad y comodidad de Archie.