El cantante Tiziano Ferro no puede más de alegría y emoción. Ha pasado casi una década desde que el italiano reveló su homosexualidad en una entrevista con Vanity Fair y actualmente le grita su amor a los cuatro vientos tras contraer matrimonio con su pareja de hace tres años.
El hombre tras éxitos como Tardes negras y Alucinado, se casó dos veces con su marido, el estadounidense Victor Allen, a quien conoció en un estudio de grabación de Los Angeles, cuando rodaba un videoclip. Allen es gerente de marketing de una empresa norteamericana y tiene 54 años, es decir, 15 más que Ferro.
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La primera ceremonia se llevó a cabo precisamente en Los Angeles, California, el pasado 25 de junio ante 100 amigos y familiares, según lo que él mismo contó en una nueva entrevista a Vanity Fair.
Tras este enlace, vino el turno de replicar la unión en Italia, aunque esta vez fue mucho más íntimo. El fin de semana pasado asistieron solo unos 40 amigos, a una ceremonia donde Tiziano vistió de gris y Victor de azul. El evento tuvo lugar en la localidad costera de Sabaudia (a unos 100 kilómetros al sur de Roma), y allí el autor de Perdona volvió a decir “sí, acepto” a su pareja.
Cabe señalar que fue el pasado 21 de febrero que Allen emocionó hasta las lágrimas a su pareja, cuando se arrodilló frente a él con un paquete de la joyería Tiffany en mano. “Lloré durante veinte minutos sin poder decir una palabra. Nuestra historia continuará, Victor será la única persona en el mundo que me ha dado ese matiz de alegría absoluta que ya no sentía desde mi infancia“, señaló el italiano a la citada publicación.
“La vida y sus increíbles vueltas. Esperando con ansias el poder compartir con vosotros esta historia de alegría y celebración del amor“, escribió en una de las postales que compartió en su cuenta de Instagram.
Y tal ha sido la cantidad de mensajes de apoyo y felicitaciones que ha recibido el artista, que también dejó unas palabras de gratitud para sus fieles fanáticos. “Si los fans reflejan el alma del artista que aman, vamos por la dirección correcta. Vuestra sensibilidad, vuestra educación, vuestra capacidad de apoyarme en las malas y contra el odio, sin caer en la vulgaridad, en la violencia verbal, en la obviedad, siempre serán un ejemplo para mí. Están orgullosos de mí y yo estoy orgulloso de ustedes. Solo esto quería decir hoy. ¡Cuánto amor, infinito amor, estoy y estamos recibiendo!”, señaló.