La relación entre el príncipe William y Kate Middleton no ha estado exenta de polémicas, sobre todo al inicio del romance, cuando la prensa y los paparazzis no dejaban tranquila a la pareja británica.
Es por eso que el futuro rey de Inglaterra decidió tomarse en serio el tema de la seguridad de su novia, pues no estaba dispuesto a dejar que el acoso mediático lastimara a Kate ni a su incipiente relación.
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El detalle de esta situación fue descrito en el libro Kate: the future queen, de la biógrafa real Katie Nicholl, donde la autora aseguró que William estaba tan preocupado que incluso pidió al Palacio de Buckingham que se relacionaran directamente con Middleton para así dar respuesta a cualquier necesidad que tuviera en cuanto a su seguridad y el estrés que significaba salir con un miembro de la realeza.
Es por eso que cuando la prensa descubrió el lugar donde vivía Kate, el príncipe William se volvió muy paranoico y comenzó a temer realmente por su salud mental.
“William era consciente de la situación y estaba ansioso por ello. Había visto de primera maano cómo su madre había sido acosada por los paparazzis y estaba decidido a que Kate no fuera sometida al mismo tratamiento“, escribió Nicholl.
Fue así que William estableció una línea telefónica directa para Kate con la oficina de prensa en St. James’s Palace y con el jefe de prensa del príncipe Carlos, Paddy Harverson.
“Nos presentaron a Kate desde el principio y nos dieron instrucciones desde el comienzo para que le brindáramos todo el apoyo posible“, dijo a Nicholl un asesor de prensa.
“Obviamente, ella fue objeto de un gran interés por parte de la prensa e intrusión de los paparazzi. William dijo que teníamos un deber de cuidado para ella y su familia, por lo que le aconsejamos cómo lidiar con las cámaras. Le dijimos que sonriera a los fotógrafos para que hubiera una mejor imagen. Le dimos consejos sobre cómo administrar los medios de comunicación y nosotros estábamos allí para apoyarla si había una crisis”, detalló el hombre.
Todo esto cuando aun eran pololos, por lo que al parecer William estaba convencido de que Kate Middleton era la mujer de su vida. Más tarde, finalmente contrajeron matrimonio y en la actualidad tienen tres hijos, la princesa Charlotte y los príncipes George y Louis.
