Manuel Jesús Gómez Díaz (58) y su hijo Manuel Gómez Roco (25) destruyeron uno de los ingresos del Casino de Talca al irrumpir con su vehículo, tras un altercado con una de las cajeras y los guardias del recinto.

Fuera del Juzgado de Garantía de la capital del Maule, Gómez Díaz explicó a la prensa que -la madrugada de este jueves, cuando ocurrió el hecho- sufrió una descompensación por ser diabético, lo que habría provocado el impacto del automóvil en el lugar, consigna el matinal de La Red.

Ambos fueron detenidos por Carabineros y quedaron imputados por daños, amenazas y conducción en estado de ebriedad. No obstante, al ser formalizados quedaron sólo con medidas cautelares y prohibición de acercarse a cualquier casino del país durante los tres meses que dure la investigación.

En la audiencia, la fiscal Gabriela Vargas explicó que ambos “son clientes habituales del Casino Talca” y que también son conocidos como “conflictivos cuando se encuentran bajo la influencia del alcohol”.

“Al mismo tiempo, M.G.R. amenazaba a las personas que iría con una pistola y los iba a hacer cagar a todos. Minutos antes, se habían escuchado disparos al exterior del casino, respecto a dos personas sospechosas que acompañaban a los imputados. Los daños ascienden a la suma de $5 millones”, dijo la fiscal.

Una descompensación

Al ampliar su explicación, el conductor del Volvo sostuvo que todo se habría originado porque él fue a pedir dos tragos, los que fueron negados por la hora. Luego, al consultar por la nacionalidad de la cajera (venezolana), él agregó que ella “debería tener más respeto con los chilenos, nosotros les abrimos la puerta aquí”. La mujer ofendida habría llamado al guardia, quien lo redujo en el piso y luego lo sacaron junto con su hijo.

“Yo estoy operado, tengo 7 infartos, yo perdí el control del vehículo, yo me iba, me metí mal. Yo sufrí una descompensación e incluso mi hijo trató de cambiar el cambio y por eso el vehículo iba para adelante y para atrás (…) Yo perdí-… Yo tuve una hipoglicemia, soy diabético (…) Tengo 3 bypass, no puedo hacer fuerzas”, aseguró Manuel Gómez.

El imputado por conducir en estado de ebriedad añadió que “al reventar el vidrio, a nosotros nos pegaron. Tú me veís el rostro, estoy todo morado. Nos sacaron la cresta po’. Me rompieron todos los vidrios del Volvo. El Volvo mío estaba nuevo (…) ¿Tú creís que voy a chocar mi auto que cuesta $25 millones? ¿Cuál sería el interés de hacer tira una vitrina?”

Cocaína

Gómez Díaz además aseguró al canal que los guardias del casino de Talca venden cocaína. “Usted por $10 mil compra un papelillo, por $20 mil se compra dos papelillos y por $50 mil compra más… Quien maneja esta situación son los guardias”, detalló.

“Nos habíamos tomado un Absolut Raspberry cada uno, no más, un vaso… Ustedes van a ver al final qué va a pasar. Sigan no más la situación. Y quiero que les quede claro: en el casino se vende cocaína”, finalizó indignado.