Tras el estreno del documental de Netflix sobre el caso de Madeleine McCann, nuevos antecedentes han salido a la luz en torno a la investigación.

Sin duda, un aspecto que generó suspicacias en torno al caso, está relacionado con las 48 preguntas que la madre de la niña, Kate McCann, no quiso responderle a la policía en 2007.

Cuando entró al apartamento, ¿qué vio? ¿Qué hiciste? ¿Dónde miraste? ¿Qué tocaste?” y “¿Buscaste dentro del armario del dormitorio principal? ¿Puedes describir lo que había?”, son algunas de las primeras preguntas que la mujer no respondió.

Además, la mujer no quiso referirse al tiempo que duró la búsqueda al interior del departamento, tras darse cuenta de la desaparición de la niña. “¿Por qué dijiste que Madeleine había sido secuestrada?”, fue otra interrogante sin respuesta.

Con respecto a las hermanos de Maddie, Sean y Amelie, quienes estaban en la habitación aquella noche, Kate tampoco quiso contestar si acaso les preguntó qué había pasado con su hermana.

AFP
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“Cuando avisó de su desaparición en las ‘Tapas’ (restaurante donde estaban comiendo), ¿qué dijo exactamente, cuáles fueron sus palabras exactas?”, “¿Qué pasó después de que avisaste?”, “¿Por qué fuiste directamente a contarle a tus amigos en lugar de gritar desde la ventana?”. No hubo respuestas.

Según revela el documental, Kate no quiso revelar quién se contactó con las autoridades para denunciar la desaparición, ni quién participó de la búsqueda.

“¿Qué quiere decir la frase ‘la decepcionamos’, al hablar de Madeleine?”, “¿Es verdad que pediste un sacerdote?”, “¿Es cierto que durante las búsquedas permaneciste sentada en la cama de Maddie sin moverte?”.

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Kate McCann tampoco habría querido responder sobre el comportamiento de Madeleine antes del viaje y si acaso había sufrido alguna enfermedad. Tampoco si tomaba algún medicamento.

“¿Es cierto que a veces te desesperó el comportamiento de tus hijos y te sentiste agobiada?”, “¿Es cierto que en Inglaterra incluso consideraste la entrega de la custodia de Madeleine a un familiar?”, “En Inglaterra, ¿alguna vez medicaste a tus hijos? ¿Qué tipo de medicación usaste?”.

La última pregunta que no tuvo respuesta fue  la más determinante de todas, y vino luego de consultarle sobre los supuestos restos de sangre humana encontradas en el maletero de su auto. “¿Tuvo alguna responsabilidad o intervención en la desaparición de su hija?”. La madre no afirmó ni negó la interrogante.