Médico asiático mató a su esposa tras quiebre: actualizó sus estados de Facebook para ocultar crimen

Una historia digna de ser contada por Carlos Pinto fue lo sucedido en India donde un médico cirujano confesó publicar durante seis meses, en el perfil de su esposa en Facebook, diversos estados para no presentar sospechas por el asesinato cometido luego de una ruptura sentimental.

Todo comenzó cuando Rakhi Srivastava, la otrora pareja del profesional de la salud, Dharmendra Pratap Singh, se divorciara de él en 2016. Sin embargo, tras este episodio, el doctor planificó su accionar para terminar con la vida de la mujer.

Ambos se reunieron en un restaurante, en junio de este año, para conversar sobre temas que involucraban, aparentemente, a sus tres hijos. No obstante, él reconoció a la policía que drogó a su ex compañera. Acto seguido, la llevó a un sitio apartado de la ciudad en un vehículo y la tiró a un precipicio cercano a la ciudad de Pokhara tras una hora de viaje. Luego de ello la enterró, según consigna Daily Mail.

Una semana pasó luego de la desaparición de Srivastava para que la familia denunciara a la policía tras no saber nada de ella. Pero la carta que tenía bajo la manga Pratap Singh permitió que los uniformados no focalizaran bien su búsqueda.

Esto porque el médico mandó a un cómplice a publicar diversos estados en el perfil de la asesinada desde una localidad ubicada a mil kilómetros de distancia, gracias a un teléfono celular comprado por él y facilitándolo a este otro implicado.

Sin embargo se pudo dar con el lugar exacto desde donde se realizaban tales actualizaciones ¿el destino? la ciudad de Guwahati. Fue allí donde la policía descubrió que no era la mujer la que interactuaba en Facebook, sino que el cómplice del mencionado doctor, según informa el diario The Times of India.

Dharmendra Pratap Singh, tras estar fugitivo desde el mes de noviembre, fue detenido el pasado 22 de diciembre luego ser interrogado 48 horas antes. Por ahora debe esperar el juicio por los cargos que se le imputarán, mientras que uno de los dos cómplices confesó que el cirujano le había pagado una alta suma de dinero por acceder al Facebook personal de la mujer.