Un registro de hinchas -que se implementaría gradualmente entre 2015 y 2016- y la posibilidad de jugar sin hinchada visitante son parte de un paquete de siete medidas propuestas el viernes por la Asociación del Fútbol de Chile (ANFP), en respuesta al retorno de incidentes violentos a los estadios.

La batería de medidas fue anunciada por el presidente de la ANFP, Sergio Jadue, un día después de que se suspendiera un duelo entre Rangers y Universidad de Chile, en el estadio de Talca, debido a graves destrozos provocados en medio del juego por hinchas.

La propuesta incluye “crear un registro nacional de hinchas” que comenzará a regir para algunos partidos del torneo de Apertura “y para todos los encuentros del Clausura, ambos de la temporada 2015-2016”, señaló el dirigente.

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Las entradas se podrán adquirir en los clubes o por internet dando sus datos personales y una foto, que servirá para identificarlos en caso de incidentes, añadió.

Además se solicitará al Gobierno el retorno de la Policía al interior del estadio ya que “los guardias de seguridad son suplementarios y no sustituyen el trabajo propio de Carabineros”, puntualizó Jadue.

A su vez, se buscará modificar los estatutos para dar la oportunidad a los clubes que lo soliciten de poder jugar sin público visitante, en algunos partidos y como medida extraordinaria para la temporada 2015-2016.

La creación de una mesa de trabajo, profundizar el apoyo a los clubes para erradicar a los barra bravas, invertir en campañas educativas y sumar al equipo de trabajo de la ANFP en los campeonatos locales a funcionarios que estuvieron a cargo de la organización en la pasada Copa América son las otras medidas.

El jueves, el partido correspondiente a la Copa Chile-2015 -disputada por equipos de primera y segunda división- se detuvo cuando la ‘U’ ganaba por 2-0 cuando antes de iniciar el complemento hinchas comenzaron a desprender butacas y tirarlas a la seguridad.

Una decena de detenidos y varios heridos fueron el saldo de los graves incidentes. Días atrás un duelo entre Everton y Santiago Wanderers se suspendió antes de su inicio por violencia entre hinchas.