Una mujer de 20 años llamó a la Central de Comunicaciones (Cenco) de Carabineros y simuló estar pidiendo sushi para denunciar una agresión sexual. De esta forma evitó que el victimario -su expareja- se diera cuenta de que contactaba a la policía.

El hecho ocurrió la tarde de este domingo en la comuna de Santiago y terminó con la detención del agresor, un hombre de 21 años, de acuerdo a la información proporcionada por Carabineros.

En el registro de la llamada, se escucha a la joven entre lágrimas decir que tiene hambre y quiere pedir sushi.

De inmediato, la funcionaria que contestó el teléfono entendió que se trataba de una denuncia, le pidió la dirección y dispuso el envío al domicilio de efectivos de la Sección de Investigación Policial (SIP) de la 2ª Comisaría de Carabineros de Santiago.

Según se informó, personal policial llegó hasta el inmueble caracterizado de repartidor de comida para concretar la detención del denunciado.

El mayor Gorka Verda, comisario de la 2ª Comisaría de Santiago, entregó más detalles de la situación, al mismo tiempo que destacó la preparación de los funcionarios de la institución.

“Personal de Cenco recibió un llamado de emergencia por parte de una mujer que manifestaba haber sido víctima de una agresión sexual. Ante el temor de ser identificada por parte de su agresor, simuló estar comprando sushi. Esto fue advertido hábilmente por el personal altamente capacitado de Carabineros”, subrayó el oficial.

Del hecho, se dio cuenta a la Fiscalía Metropolitana Centro Norte, que dispuso que el aprehendido pase a control de detención este lunes. El fiscal instruyó el trabajo de la SIP, el Labocar y la 35ª Comisaría Delitos Sexuales para el desarrollo de la investigación.