Durante la jornada de este martes, la ministra de Salud, Begoña Yarza, anunció un gran cambio en el Plan Paso a Paso, luego de dos años de pandemia.

Entre las modificaciones se encuentran los nombres de las fases, instrucciones sobre el uso de la mascarilla y recomendaciones sobre la asistencia presencial a lugares de trabajo y colegios. Los cambios serán efectivos desde el jueves 14 de abril.

“Estamos en una etapa epidemiológica distinta a cuando debió elaborarse el primer Paso a Paso, hoy tenemos una baja circulación viral, la cobertura de vacunación del esquema primario supera el 90% y las personas han aprendido a seguir las recomendaciones”, aseguró la ministra.

“Por eso, podemos avanzar, pero siempre con responsabilidad y recordando que sigue en pie la posibilidad de retroceder si así amerita”, continuó.

Seguimos Cuidándonos, Paso a Paso

El nuevo plan, elaborado por especialistas, consiste en escenarios extremos basados en el contexto internacional, divididos en tres fases: Alto Impacto Sanitario, de Medio Impacto Sanitario y de Bajo Impacto Sanitario.

La Fase de Alto Impacto Sanitario es el más grave de los escenarios, determinado por una circulación viral alta y una proyección crítica sobre la red asistencial, además de un alto número de casos graves y fallecimientos.

El uso de la mascarilla será obligatorio y se exigirá pase de movilidad. Se recomendará el teletrabajo para personas de alto riesgo y la asistencia a colegios será voluntaria.

La segunda fase, de Medio Impacto Sanitario, contempla una ocupación UCI moderada. Se podrá evitar el uso de mascarilla en espacios abiertos donde se pueda mantener distancia física mayor a un metro, pero seguirá siendo obligatoria en espacios cerrados.

Por otro lado, se continuará exigiendo el pase de movilidad. Además, se sigue recomendando teletrabajo en casos de riesgo, pero la asistencia a clases presenciales será obligatoria.

Finalmente, la Fase de Bajo Impacto Sanitario, implica que las consultas respiratorias y la ocupación de UCI son bajas.

El uso de la mascarilla será obligatoria en recintos cerrados, pero podrá dejar de usarse en espacios abiertos, manteniendo distancia mayor a un metro. Se eliminan las restricciones de número de asistentes y distancia en eventos masivos, aunque seguirá exigiéndose pase de movilidad.

Se levanta la recomendación de teletrabajo y la asistencia a clases presenciales sigue siendo obligatoria.