El avión más grande del mundo, el AN-225 Mriya, fue destruido en un ataque aéreo ruso desarrollado en el aeropuerto de Hostomel, en cercanías de Kiev, durante la invasión de Ucrania.

La restauración de la nave tardará más de cinco años, afirmaron este domingo fuentes oficiales ucranianas.

“Según estimaciones preliminares, (la restauración de la aeronave) costará unos 3.000 millones de dólares y tardará más de cinco años”, escribió en Facebook el consorcio estatal Ukroboronprom.

“Rusia puede haber destruido nuestro Mriya, pero nunca podrán destruir nuestro sueño de un Estado europeo fuerte, libre y democrático“, escribió en Twitter el ministro ucraniano de Exteriores, Dmitro Kuleba.

Ukroboronprom, la empresa estatal del arsenal industrial-militar del país, precisó que aplicará todos los esfuerzos para que los gastos de restauración corran a cargo del “país agresor”.

La aeronave destruida, que realizó su primer vuelo en 1988, contaba con seis motores capaces de alcanzar los 850 kilómetros por hora, ascender hasta 12.000 metros y volar sin escala distancias de hasta 15.400 kilómetros.