El presidente ruso, Vladimir Putin, anunció una operación militar en la frontera este de Ucrania, particularmente en las zonas de Donetsk y Lugansk.

“Hemos tomado la decisión de emprender una operación militar especial”, declaró Putin en un inesperado mensaje por televisión, denunciando un supuesto “genocidio” orquestado por Ucrania.

El mandatario también dijo que buscarán “desmilitarizar” Ucrania y llamó al ejército de ese país a deponer las armas para evitar un enfrentamiento.

Mientras que el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, acusó al líder ruso de lanzar un ataque “no provocado e injustificado” contra Ucrania, y de apostar por una “guerra premeditada” que provocará pérdidas “catastróficas”.

“Solo Rusia es responsable de la muerte y la destrucción que este ataque traerá y Estados Unidos y sus aliados y socios responderán de una forma unida y decidida. El mundo hará que Rusia rinda cuentas”, señaló Biden en un breve comunicado.

Explicó también que seguirá la situación desde la Casa Blanca y se reunirá este jueves con sus homólogos del G7, antes de dirigirse a los estadounidenses para “anunciar más consecuencias” contra Rusia por “este innecesario acto de agresión contra Ucrania y la paz y seguridad globales”.

“También nos coordinaremos con nuestros aliados de la OTAN para asegurar una respuesta fuerte y unidad que disuada cualquier agresión contra la Alianza”, añadió el presidente estadounidense.