El 14 de septiembre pasado, la familia de un joven taxista denunció su desaparición, justo cuando se preparaban para celebrar su cumpleaños número 36, en Perú.
La pesadilla para sus cercanos comenzó cuando Gerver Coz Vara salió de casa por una “carrera”.
Cuatro días más tarde vecinos del sector Cieneguilla alertaron sobre movimientos extraños y un olor a quemado.
Al acercarse a la zona arqueológica de Río Seco, vieron cómo un cuerpo había sido consumido por el fuego, quedando convertido en cenizas.
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La policía llegó al lugar y al creer que podría ser Gerver Coz, llamaron a la familia para que intentara identificar alguna de sus pertenencias que se habían salvado.
Su hermano fue el encargado de hacerlo, quien encontró unas llaves y confirmó posteriormente que le pertenecían al joven taxista.
Según los familiares y efectivos policiales, el móvil del crimen habría sido robarle su vehículo Toyota RAV 4, el que también había desaparecido.
Crimen horroroso
El cuerpo de Gerver fue descuartizado y su cabeza no estaba en el lugar del hallazgo. La policía comenzó una intensa búsqueda para dar con los posibles sospechosos.
Es así como el pasado 2 de octubre, Agentes de la División de Investigación de Homicidios de la Policía Nacional del Perú, detuvieron a Giancarlo Sánchez Suárez cuando conducía la camioneta de la víctima.
El joven de 25 años en un primer momento negó ser el responsable de la desaparición de su amigo. No obstante, poco después confesó todo.
“Yo lo maté, lo descuarticé, quemé sus restos y su cabeza está enterrada en el patio de mi casa”, señaló en su declaración.
Según contó Sánchez Suárez, el día 14 llamó a Coz Vara para invitarlo a celebrar anticipadamente su cumpleaños, tras lo cual cenaron y bebieron.
En medio de esta junta tuvieron una discusión, que terminó en el homicidio.
Lo cercenó
Según el autor del crimen, no sabía qué hacer con el cuerpo, pero posteriormente decidió cercenarlo, meterlo en bolsas plásticas y se dirigió, a bordo del vehículo, hasta el lugar donde sus restos fueron finalmente hallados.
Con respecto a la cabeza, policías se dirigieron al domicilio, donde efectivamente la encontraron: estaba en un recipiente, al interior de una mochila y bloqueada por concreto, según informó Infobae.
La familia de la víctima pide que caigan las máximas penas contra el responsable de su muerte.
