Decenas de cédulas de identidad chilenas estarían siendo recogidas en la frontera entre Estados Unidos y México, donde miles de migrantes -en su mayoría haitianos- intentan cruzar hacia el norte en búsqueda de asilo y oportunidades que no encontraron en el hemisferio sur.

Según fue reportado por Todd Bensman, investigador del Centro para Estudios sobre Migración (CIS por sus siglas en inglés), los carnet están siendo descartados junto con pasaportes brasileños, otro país frecuentado por la diáspora haitiana.

“La razón por la cual los migrantes haitianos descartan sus identificaciones chilenas y brasileñas por aquí en el lado mexicano es para ocultar a los evaluadores de asilo (en los EEUU) que ya estaban situados segura y prósperamente por años y años antes de venir por la mejora estadounidense”, sostuvo el especialista.

Esta postura es compartida por el Departamento de Seguridad Nacional (DHS), indicando que los migrantes han enfrentado problemas para regularizar sus situaciones en los países de sudamérica donde han probado suerte. En estos casos en particular, habrían conseguido cédula de identidad en Chile, es decir, el Servicio de Registro Civil chileno les otorgó un RUT reconociéndoles como personas extranjeras dentro del territorio nacional.

La situación ha generado disputas políticas tanto en los Estados Unidos como en México. En este último país, el canciller mexicano Marcelo Ebrand, acusó que los migrantes están siendo engañados por una errónea interpretación de las nuevas normas migratorias estadounidenses.

“Los están engañando, es un periplo, es un… Imagínense, salir de Haití, ir a Brasil, ir a Chile, tener condición de refugio, buscar trabajo. Hay niños que nacieron en Chile o en Brasil, que ahora sus dirigentes les digan: ‘Vámonos a Estados Unidos rápido porque nos van a dar la residencia o la nacionalidad norteamericana posiblemente’. Pues es un engaño monumental, eso no es cierto”, planteó el secretario de Estado según lo citaron medios locales.

Del “sueño chileno” al “sueño americano”

Cerca de 13 mil migrantes irregulares, en su mayoría de Haití, quedaron en los últimos días retenidos por las autoridades estadounidenses en un campamento improvisado bajo el puente internacional que une a Del Río (Texas) con la mexicana Ciudad Acuña, en Coahuila.

Los haitianos provienen de Brasil y Chile después de que, en agosto, el Departamento de Seguridad Nacional de Estados Unidos (DHS, en inglés) informó de la ampliación del programa del Estatus de Protección Temporal (TPS), un anuncio que los traficantes están tergiversando, según dijo el martes el canciller mexicano.

Ante las dificultades, algunos decidieron acudir a la Ciudad de México para intentar permanecer de manera legal en el país latinoamericano.

Marie se fue muy joven de Haití por la inseguridad y estuvo viviendo más de dos décadas en Santo Domingo (República Dominicana) y después se fue a Chile, donde solicitó varias veces la residencia pero no consiguió obtenerla.

“Yo le dije a mi esposo que me iría para otro país que esté abierto para los migrantes que es México y quería cruzar a Estados Unidos porque tengo familia allí”, detalla la caribeña.

Después de navegar, caminar, tomar autobuses y taxis, logró llegar a Guatemala y después a Tapachula. Ahora su objetivo es intentar conseguir ser residente en México para poder trabajar y tener un lugar donde vivir.