Como un “acto criminal” catalogó el presidente del Colegio de Profesores, Carlos Díaz, los cambios en el Plan Paso a Paso, en relación al regreso a clases presenciales.

De igual forma, el representante de los docentes acusó que los cambios se realizaron “sin escuchar a las comunidades educativas, sin escuchar al colegio médico, sin escuchar a los especialistas”, y que las modificaciones “no aportan nada nuevo respecto a la política que hemos venido conociendo desde un inicio”.

Tras estos cuestionamientos, el ministro de Educación, Raúl Figueroa, afirmó que no entraría en polémicas.

El secretario de Estado declaró que no se haría cargo de esos “epítetos”. A lo mejor lo que busca es que se cierren las puertas al diálogo. Nosotros jamás vamos a cerrar las puertas al diálogo”, dijo en entrevista con Radio ADN.

“No voy a entrar ni un segundo en una polémica adicional que jamás he buscado con el Colegio de Profesores”, agregó.

Asimismo, Figueroa hizo un llamado al presidente del Colegio de Profesores advirtiendo que “si no somos capaces de generar confianza, obviamente que esto va a fracasar”, y si eso ocurre, “son los alumnos los que pagan el precio”.

“Es bien importante que podamos colaborar. Y esto lo digo derechamente al presidente del Colegio (de Profesores), que ayuden un poco a que esto efectivamente se pueda mover”, concluyó sobre el tema.