Este martes pasado el mediodía se llevó a cabo el control de detención de Fernando Behm, único acusado del asesinato de dos hermanos -de 14 y 18- en la comuna de El Bosque, el pasado 17 de mayo.

En ese contexto, el fiscal Christian Toledo entregó diversas pruebas y testimonios respecto al comportamiento del imputado, incluyendo un audio que le envió a un primo tras cometer el crimen y una declaración del padre de Behm.

El hombre, identificado con las iniciales F.B.M. y que vive junto a su nueva familia en Antofagasta, señaló en su relato que su hijo tendría un “retraso mental” y que “vive en un mundo de Peter Pan”.

En un periodo Fernando se habría instalado en el norte donde su padre lo recibió en su casa, sin embargo, ocurrieron problemas por los que “ya no lo pudo mantener en la casa”.

“Era medio llevado a sus ideas, le generaba problemas con su nueva pareja e hijos”, dijo el hombre, siendo uno de ellos una situación que ocurrió con la hija menor del hombre, es decir, la hermanastra de Fernando.

“Hay un elemento que agrega en su declaración y que es relevante. Dice que su hija menor, que mantiene con su pareja en Antofagasta, le había manifestado que el imputado le había hecho tocaciones. Ahora que había salido este caso, (la presunta afectada) lo manifestaba“, dijo el fiscal.

Cabe recordar que el día 19 de mayo, en el matinal Bienvenidos, un hombre llamado Jaime Quezada, reveló que el 2019 acogió en su casa a Fernando, quien era amigo de su hija en ese entonces, pues al igual que la madre de las víctimas de El Bosque, se compadeció porque -según él- no tenía dónde vivir. “Él era como un amigo de mi hija, le dijo que no tenía dónde vivir, que lo habían echado, que no tenía donde llegar, entonces nosotros como familia lo acogimos“, dijo.

Fernando se quedó con ellos hasta febrero del 2020 y si bien al comienzo parecía una persona tranquila, con el paso del tiempo Jaime empezó a notar comportamientos un tanto extraños que culminaron con un intento de abuso contra una hija.

Él trató de violar a mi hija, trató de abusar de ella y yo ahí lo tomé, le pegué y lo eché. Hicimos la denuncia“, relató el hombre.

Mi hija nos avisó y nos contó lo que pasó y nosotros lo enfrentamos, pescó todas sus cosas en una caja de cartón y se fue“, agregó.

Al día siguiente, en el mismo matinal, la afectada –Camila Quezada– corroboró lo que dijo su padre, agregando que Behm desarrolló una especie de obsesión con ella.

“Pasaron las semanas y aparecieron conductas extrañas en él, se empezaron a notar algunas obsesiones hacia mi persona, sus celos hacia mi familia porque pasaba tiempo conmigo, incluso hasta de mi pareja. Empezó a meterse a mi pieza y yo tenía que echarlo”, agregó.

Camila, detalló que la noche en la que él entró a su habitación tenía claras intenciones de agredirla. “Se metió en mi pieza, se tiró encima mío, yo lo empujé, llamé a mi papá y ahí se terminó todo contacto con él“, aseguró.

Claro que eso solo duraría un tiempo, pues después comenzó una especie de acoso telefónico y por redes sociales hacia ella y su familia. “Las llamadas de numeros desconocidos, acoso por redes sociales, hubo un tiempo que tuve que cerrar mi Instagram, Facebook, dejar de lado mi vida, hasta que un día dije ‘no’ e hicimos las denuncias correspondientes, pedimos una orden de alejamiento, mostré todas las pruebas necesarias pero la justicia no hizo nada”, aseguró.