Diputados de oposición presentaron este martes una reforma constitucional que busca la condonación universal de las deudas estudiantiles.

La iniciativa, impulsada por el candidato presidencial de Nuevo Trato, Pablo Vidal, es respaldada por parlamentarios como Matías Walker (DC), Camila Vallejos (PC), Camila Rojas (Comunes), Leonardo Soto (PS), Andrea Parra (PPD) y Marcela Hernando (PR), y busca que en un periodo máximo de tres meses el presidente de la República, presente un proyecto de ley que establezca un mecanismo que ayuda a eliminar dichas deudas.

A su vez, el documento señala que se espera que se incluya “la prohibición de la mantención de registros de deudores morosos de créditos de educación superior por parte de instituciones que otorguen créditos, y la atribución de potestades suficientes a algún órgano de la administración del Estado para fiscalizar efectivamente el cumplimiento de dicha prohibición”.

Reforma constitucional

La presentación de la reforma llega meses más tarde de las declaraciones de Vidal, quien aseguró en febrero pasado estar trabajando con personeros ligados a la educación y que ex empleados de gobierno en años anteriores, además de unir fuerzas con el movimiento estudiantil que ha exigido la condonación del CAE desde el año 2005, para elaborar la petición al Ejecutivo.

“La necesidad de que el Estado se haga cargo de financiar el excesivo endeudamiento estudiantil en el contexto de la pandemia del COVID-19 es un debate urgente y que permitirá aliviar a miles de deudores, además de inyectar vía condonación de deuda más liquidez a todas sus familias”, expresó el diputado este martes, según informó La Tercera.

Por otra parte la presidenta de Senado, Yasna Provoste, quien acompañó a los legisladores a presentar el proyecto de ley, aseveró que la iniciativa “busca dejar atrás una realidad muy dolorosa donde el talento y la necesidad de avanzar en el sistema educativo significaba para muchas familias una pesadilla y una mochila enorme”.

“Esto es una preocupación, un motivo más, de esta falta de diálogo entre el gobierno y las universidades chilenas. Por eso que nos parece que son tan importante iniciativas como ésta que, de alguna forma, van configurando un modelo de sociedad distinta donde seguir estudiando no signifique nunca más una pesadilla para las familias del país que tengan que transitar largos años con una mochila que no les permite seguir adelante”, cerró.