Fue en febrero pasado cuando se dio a conocer el macabro crimen de María Soledad Gómez. La española fue asesinada y descuartizada por su hijo, quien luego se comió sus partes en compañía de su perro.

La policía calificó el hecho como “el crimen más atroz de la historia de España”, y ha sido tal el impacto que ha surgido cada vez más interés en conocer detalles de la vida y personalidad del autor de este brutal acto: Alberto Sánchez Gómez.

En este contexto, el pasado martes el acusado de 28 años aseguró ante el juez del caso, que “oía voces en la televisión y en mi cabeza”. “Mata a tu madre, mata a tu madre, mata a tu madre”, le decían.

El acusado declaró ante el tribunal de la Sección Quinta de la Audiencia Provincial de Madrid, y aseguró que ha sufrido esos padecimientos psicológicos desde hace años, según consigna el diario electrónico El País.

De acuerdo a su relato, a los 16 años empezó a escuchar susurros en su cabeza. Sin embargo, las voces se incrementaron cuando se fue a estudiar Contabilidad y Finanzas a Grecia, al mismo tiempo que empezaba a consumir drogas de manera habitual.

Cuando regresó a España, Sánchez fue ingresado varias veces en el Hospital de la Princesa en Madrid, para una revisión psiquiátrica. No obstante, admitió que dejó de tomar los fármacos porque lo dejaban “con ganas de suicidarme”.

Recordemos que el acusado tenía una orden de alejamiento con su madre, por lo que vivía en la calle o en casas okupa. Su rutina era “beber todo el día, fumar un porro y oír voces”, y a veces cuando miraba la tele, “veía mensajes ocultos”, declaró ante el juez.

Luego de casi una hora de juicio, la fiscal le preguntó si seguía escuchando voces, a lo que Sánchez respondió: “No, otras. Me llaman por mi nombre, me llaman asesino, a veces sí, a veces no”.

Cabe señalar que la persecutora pide una pena de 15 años y cinco meses de prisión para el acusado.