En medio del proceso de masificación de la vacuna contra el coronavirus, Chile comenzará a buscar la autorización necesaria para que todos los ciudadanos tengan acceso al prototipo.

Para esto, el Instituto de Salud Pública (ISP) convocó a un panel de expertos para ver si finalmente la farmacéutica Pfizer y BioNTech tendrán luz verde para que su vacuna comience a ser utilizada en el país.

En el contexto mundial, la compañía busca que su prototipo sea masificado antes de terminar los estudios clínicos, debido a su alto porcentaje de éxito. Por lo mismo, y tras entregar los documentos necesarios en Estados Unidos, el 07 de diciembre próximo se espera que se dé una respuesta oficial sobre si será requerida o no en este país.

Claro que no es la única empresa que busca imponer su vacuna, ya que Moderna también presentó su trabajo y todo lo necesario para ser utilizada en Norteamérica.

En el caso de Chile, entre el 10 y 18 de diciembre el ISP y el comité de expertos debatirá respecto a si darán la autorización para que el proyecto de Pfizer y BioNTech sea habilitado.

Según detalló CNN, en caso de que se apruebe, se iniciará otro proceso en el que se revisarán todos los lotes de vacunas, certificados de liberación y condiciones de transportes, poniendo especial énfasis a las alertas de la Interpol de posibles robos.

Cabe mencionar que si la vacuna contra el COVID-19 llega al país de manera oficial, será distribuida primero en personal de salud, transportistas, Fuerzas Armadas, recolectores de residuos, bomberos, profesores, incluidos los jardines infantiles y funcionarios públicos que cumplen labores esenciales; en el segundo grupo están las personas mayores de 60 años y enfermos crónicos; cerrando con la población sana entre 18 y 59 años.