Luego de un extenso juicio, este martes se realizará la formalización a Martín Pradenas en el caso de Antonia Barra, joven de 20 años que se suicidó tras acusar que había sido violada por el imputado.

Pradenas enfrenta delitos de abuso sexual impropio y violación a mayor de 14 años en cinco hechos distintos, y la Fiscalía ya cuenta con una serie de pruebas que sería claves para eventualmente declararlo culpable.

La primera de ella tiene que ver con una llamada de Antonia con sus amigas donde se refería a la supuesta violación: “Dice con nombre y apellido la persona que cometió el delito, que es Martín Pradenas. Entonces, esto es una prueba material de que realmente lo que sucedió ahí fue una violación”, explica Alejandro Barra, padre de Antonia, en un reportaje de Meganoticias.

Junto con esto, se revelaron unas imágenes de una cámara de seguridad de un supermercado donde se habría realizado el primer abuso contra Antonia de parte de Pradenas: “En este video queda evidente de que la Antonia no quería nada, él la tironeo, las piernas se doblan al caminar, el rechazo que le provoca el tipo cuando está haciendo el abuso”.

Es justamente en este punto que Martín Pradenas acusa que Barra pudo haberse ido, pero a su juicio, como eso no ocurrió, siguió adelante.

Se presume que estuvo drogada

Otras imágenes muestran a Martín y Antonia llegando a una cabaña que es donde ella acusa que fue violada. El punto más importante del relato, es que la joven asegura que no recuerda cómo llegó a ese lugar.

“Ella dice ‘no sé cómo llegué a esa cabaña’, ¿y por qué no se acuerda? Porque el modus operandi de este señor es drogar a las personas para bajarle la fuerza que ellas tienen y aprovechar para abusar”, explicó Alejandro Barra.

Sumado a los audios que Antonia envió a sus amigas, la Fiscalía también pidió el celular del acusado. Aquí se percataron que este era nuevo, ahí fue donde la madre de él confesó que había comprado otro, ya que el antiguo lo destruyó.

“Ese teléfono no paraba de sonar por los mensajes, y derrepente me dio mucha angustia y rabia y en el acto de arrebato tomé el teléfono de Martín y lo tiré al suelo, lo pisé y lo rompí”, reconoció.

La Fiscalía además pudo dictaminar que tras periciar el notebook de Pradenas, se borraron cerca de 14 mil imágenes, y que eliminó su cuenta de Instagram antes de ser investigado.

Por otro lado el fiscal Miguel Rojas detalló que Martín Pradenas reveló que él no tiene solo una acusación por delitos sexuales.

“La Fiscalía lleva una investigación por su participación en cinco hechos distintos, cinco hechos que afectaron a cinco víctimas distintas y que dan cuenta de distintas agresiones sexuales proferidas por el imputado desde el año 2010 hasta el año 2019”, comentó.

De hecho, se explicó que la última denuncia se interpuso el 30 de junio del año pasado. Lo que se destacó de este caso es que fue contra una menor de edad de 16 años, que tuvo un relato muy parecido al de Antonia.