Este viernes el ministro de Salud, Jaime Mañalich, informó durante el reporte diario de contagiados y decesos por COVID-19, una nueva prueba de PCR para detectar el coronavirus.
El objetivo de este nuevo examen denominado PCR por saliva, es aumentar la capacidad de testeo en la atención primaria, evitar las aglomeraciones, proteger al personal de salud y ahorrar tiempo.
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Para acceder a esta prueba que estaría disponible a contar de la próxima semana, se debe pedir una hora en el consultorio que le corresponda y luego será usted mismo quien se tome la prueba.
“Se les va a pasar un frasco y habrá un funcionario de la salud atendiendo a 20 personas, las cuales se deberán sentar separadas. Deben llena el frasco de secreciones de saliva hasta un tercio del envase y entregarlo”, detalló el Ministro.
En conversación con LUN, el Rafael Medina del laboratorio de Virología Molecular de la Facultad de Medicina de la Universidad Católica, señaló que el PCR por saliva es una técnica muy similar a la del PCR convencional con hisopado nasofaríngeo (se ingresa una tórula por la nariz).
“Ambas debes procesarlas con la técnica de PCR para detectr o no al virus mediante la extracción de su material genómico; lo único que cambia es cómo se está tomando la muestra y de dónde proviene esta”, aclara.
En cuanto a las diferencias, el académico indica que en la convencional, las secreciones se dejan en un tubo con un líquido especial, pero en este caso, como es con saliva (de la garganta), se deja simplemente en un contenedor estéril común y corriente.
“Ese fluido, la secreción de la garganta más la saliva, es loq ue se usa para la extracción del genoma viral y su procesamiento con la técnica del PCR. Es suficiente 1ml de saliva, algo así como una cuchara de té”, indica.
Según un estudio cliíncio del laboratorio donde trabaja, ambas técnicas tienen el mismo valor diagnóstico, es decir, la misma capacidad de detectar el virus, durante los primeros 10 días del inicio de los síntomas de COVID-19.
Además, la técnica es más sencilla y más barata, porque no necesita tórula ni el tubo, que tienen un costo de $2.500, en cambio, un frasco pequeño estéril no supera los $120.
Cabe señalar que, según Mañalich, este método deberá estar disponible en todos los consultorios del país a más tardar el 30 de junio.
