“¿Cómo lo digo, en diplomático o lo digo en chileno? Sobre mi cadáver. Y la razón es política”, contestó la Alta Comisionada para los Derechos Humanos de la ONU, Michelle Bachelet, ante la pregunta si volvería a ser candidata de la Presidencia de Chile. 

La exmandataria estuvo en un conversatorio de la Fundación Horizonte Ciudadano -que fue creada por ella en 2018- donde analizó el impacto del COVID-19 tanto en Chile como el en mundo.

La democracia exige nuevas caras, que no quiere decir que sean caras jóvenes necesariamente, pero nuevas caras. No puede ser que porque no haya nadie más, que la misma señora que ya estuvo dos veces vuelva por tercera vez. Creo que eso no le hace bien a la democracia”, expresó.

Y agregó: “Yo no volvería como candidata, sino estoy en contra de todos estos grupos cerrados que toman decisiones y que no amplían a la ciudadanía, que ha mostrado ser responsable, seria y capaz de tener propuestas, también. Así que yo, de verdad, no. Y tampoco me interesa ser secretaria de las Naciones Unidas, por si acaso“.

Chile y el COVID-19

Respecto a las consecuencias sociales de la crisis sanitaria por la pandemia COVID-19, Bachelet dijo que “nadie puede pretender que volveremos a funcionar tal como lo hacíamos, por ejemplo, en noviembre del 2019“.

Y sobre esa línea, se refirió a cómo el Gobierno ha combatido la pandemia, específicamente sobre las protestas que han surgido en varios barrios de Santiago por la falta de alimentación.

“He leído, he escuchado y me han mandado información de las protestas que han estado surgiendo en barrios de Santiago, como El Bosque, por ejemplo, y en otras partes con letreros que dicen ‘tenemos hambre’. Es clave, y así lo recomendé, generar mecanismo de protección social importantes, porque claro, ha habido distribución de canastas de alimentos, pero parece que son escasas comparativamente para la situación“, señaló.

Es que para la expresidenta del país, la solución es “el diálogo entre actores sociales, no solo entre actores políticos. En nuestro país, como hay una falta de credibilidad de muchas instituciones, es clave sentar a todos los actores, y la sociedad civil tiene que estar ahí”.