Fue el pasado fin de semana que se vivió una tremenda polémica, cuando Cathy Barriga comunicó a través de sus redes sociales que una vecina de Maipú había fallecido por coronavirus. Minutos después, el ministerio de salud acusó que esa información era falsa, ya que esta persona había fallecido por otras razones.

Esto desató un enfrentamiento entre la alcaldesa y el ministro Mañalich. Mientras la primera acusó que tenía el certificado de defunción que especificaba la causa de muerte, el jefe de cartera era enfático en decir que todo era una mentira. Al final, se logró comprobar que hubo un error en el documento oficial, ya que se tomó en cuenta como resultado el test rápido, y no el PCR que es el examen definitivo, y que dio negativo.

El gran problema es que esto se aclaró después del funeral de esta mujer, por lo que la familia vivió minutos terribles ya que no pudo despedirse de su ser querido como querían. Por lo mismo, Max Terán padre e hijo, hablaron con Mucho Gusto, donde dieron su versión de lo ocurrido.

Según contó Max, el hijo de esta vecina de Maipú, solo les informaron que había fallecido por coronavirus con el certificado de defunción, lo que activó el protocolo de funerales. No pudieron vestirla para la ocasión, y muy pocas personas pudieron verla antes de ir al cementerio. De hecho, acusaron que fue por la prensa que lograron comprobar que no estuvo contagiada.

“El domingo la enterramos, pasaron cinco personas a verla y nadie más (…) ¿Por qué no nos dijeron que el examen fue negativo?”, expresó el joven. En este contexto fue que agradeció a la alcaldesa Barriga porque según él, fue la única que mantuvo el contacto.

Lo más complejo, es que la familia Terán explicó que fue luego del funeral y tras la polémica conferencia de Mañalich, donde acusó a Barriga de ‘mentirosa’, que un funcionario del Instituto de Salud Pública llamó a Max padre para informarle que el examen era negativo. Incluso, le advirtieron que el certificado de defunción lo había firmado un interno, y que por eso se generó el error. Esto resultó ser falso, ya que finalmente fue un médico cirujano el que dio su visto bueno respecto al pronóstico.

El marido de la mujer en tanto, acusó que aún sigue muy dolido, ya que sabe que pudo haber hecho un velorio como correspondía, pero no pudo: “Cualquier persona espera acompañar a alguien cuando fallece. Nos dijeron que no podíamos ir porque tenía COVID-19”, agregando que no sabe si tomará acciones legales contra el Gobierno.

Por este error, interpeló directamente al ministro: “Si el señor Mañalich tenía el documento el día anterior, por qué no mandaron a una persona que nos avisaron que no tenía COVID-19. Nos consideran como un número, no les interesamos (…) con esto que tuvimos cambiar toda mi casa, pensando que había coronavirus, por lo que decía el certificado. Saludábamos a la gente por la ventana”, acusó Max.

Al cerrar, el viudo comentó algo muy delicado. Además de asegurar que nadie lo ha llamado para pedirle disculpas, acusó que actualmente se ha tenido que hacer cargo de los gastos médicos de todo esto, asegurando que quedó con una deuda millonaria y que deberá otorgar el 25% de su sueldo para financiar esto.