Fue este miércoles que el ministerio de Justicia ingresó al Congreso un proyecto de ley que buscará conceder un ‘indulto general conmutativo’ a todas las personas que estén cumpliendo penas en las cárceles del país, y que sean parte del grupo de alto riesgo por el coronavirus.
La idea es que de aprobarse en el Parlamento, se pueda beneficiar a cerca de 1.300 reos, para que puedan cumplir su condena en sus casas. Según contó el ministro Hernán Larraín, se busca beneficiar a los reclusos mayores de 65 años, a las embarazadas, a mujeres con hijos menores de dos años que viven en los penales y a las personas que cumplen reclusión nocturna bajo ciertas condiciones.
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“La población penal está en una situación particularmente compleja por el encierro al que están obligados y eso hace que Gendarmería esté aplicando día políticas especiales de control sanitario en distinto sentido para cuidar tanto a la población penal como a quienes trabajan en las instituciones dentro de Gendarmería”, explicó Larraín, según lo detallado por el diario La Tercera.
Este proyecto además de estar pensado para el grupo de riesgo que está dentro de las cárceles, también busca evitar que haya tránsito de personas que entran y salen de los recintos, como el caso de quienes cumplan reclusión nocturna. Por lo mismo se busca que cumplan las condenas en sus domicilios, pero bajo un estricto control de los gendarmes.
Ahora bien, con respecto a los detalles del indulto, para quienes cumplan ‘penas de reclusión parcial nocturna en establecimientos penitenciarios’ “se exige un tiempo mínimo de condena de un tercio de su pena, y que les reste por cumplir un saldo igual o inferior a los 36 meses”. Con esto, la persona deberá cumplir el resto de la pena con ‘reclusión domiciliaria nocturna’.
En el caso de quienes estén cumpliendo una ‘pena privativa de libertad, y se encuentran gozando del beneficio de salida controlada al medio libre’ “se exige un tiempo mínimo de condena de la mitad de su pena, y que les reste por cumplir un saldo igual o inferior a los 36 meses”.
“Este flujo de ingreso y egreso (de presos) es extremadamente peligroso por la posibilidad de contagio que pueden traer al ingresar diariamente al establecimiento penitenciario”, detalló el jefe de cartera de justicia.
También está el caso de los que cumplen condena privativa de libertad y que les resten ‘menos de 36 meses de cumplimiento de la pena, y estuvieren beneficiados con el permiso de salida dominical o con el permiso de salida de fin de semana, pasarán a cumplir transitoriamente su condena mediante pena de reclusión domiciliaria total, por el término de seis meses contados desde el día de entrada en vigencia de esta ley’. Luego de terminado ese tiempo, volverán al sistema de reclusión original.
Larraín además aclaró que quedan excluidos de este indulto los que hayan cometido delitos graves, como homicidios o violaciones de distinta forma: “La población que es beneficiada es aquella que tiene una peligrosidad menor y eso se va a traducir en que no van a poder salir aquellos que tengan condenas mayores”, cerró el ministro, sobre este proyecto que busca descongestionar las cárceles durante este tiempo de crisis sanitaria.
