Tras el fracaso de trasladar los órganos donados del fallecido Joaquín Bustos, desde la Clínica Alemana de Temuco hasta la región Metropolitana, el ministro de Salud, Jaime Mañalich, detalló el protocolo que siguió para efectuar el procedimiento.

Poco antes, la Fuerza Aérea se desligó de la responsabilidad atribuida a través de un comunicado, señalando que siempre estuvieron disponibles.

Como dice el protocolo, la primera opción es acudir a las empresas privadas que tienen convenio para esta operación. Mañalich aseguró que todas “se demoraron en contestar”: no tenían avión disponible hasta el día siguiente.

“La familia fue muy intensa en señalar que ellos querían que la donación se efectuara antes de la medianoche del sábado. Eso motivó a llamar a Carabineros“, dijo. No obstante, la institución tampoco disponía de aeronaves.

Tras ello, fue la jefa de gabinete del ministro quien llamó a la FACh a las 22:41 horas, seis horas después del diagnóstico. “La FACh dijo que tenía disponibilidad -aproximadamente- para una hora y media después”, señaló.

“Es bastante poco frecuente que se tenga que recurrir a la FACh. Con Carabineros basta”, agregó. Mañalich incluso reveló que él mismo llamó al médico de turno de la Clínica Alemana de Temuco, con lo que el Dr. Peña le habría manifestado que ya no se podía demorar más el procedimiento, pues el paciente estaría entrando a pabellón para extraer los riñones.

Habría sido, entonces, cuando se retractaron de la solicitud, pasadas las 23:00 horas.

Pérdidas

“Nosotros tenemos aproximadamente un 7% de pérdida de órganos por temas logísticos“, dijo el titular de Salud y comparó las cifras con España (“el mejor centro de trasplante del mundo”, a su juicio), donde existe un 4% de pérdida.

Ante esto, Mañalich recalcó la necesidad de crear centros de trasplante multiorgánicos fuera de Santiago, donde enfatizó que la prioridad “tiene que ser Temuco, donde existen todas las disposiciones para concentrar los trasplantes que el sur de Chile pueda generar”.

Por otro lado, el jefe de cartero aseguró que esto no le parecía “una negligencia”, pues “en cualquier parte del mundo se pierden órganos por términos logísticos”.

Añadió que los órganos tienen “complejidades muy específicas” y que trasplantar corazón, hígado y pulmón es imposible en más de 3 horas, pues se pierde su funcionalidad.