El pasado domingo se dio a conocer una denuncia en la que se acusaba que una enfermera habría utilizado la misma jeringa para vacunar contra la influenza a varios niños. Con el pasar de los días, el caso se ha ido complicando más, ya que el número de afectados habría aumentado considerablemente.

Por lo mismo, la Seremi de Salud Metropolitana y personal de la PDI investigan la posible reutilización de jeringas durante una vacunación en un colegio de Puente Alto.

Ambas instituciones se encuentran realizando pericias de forma paralela para esclarecer lo sucedido en el colegio Alicante del Valle, donde los apoderados acusaron de esto a una enfermera que habían contratado para el proceso, luego que un estudiante de tercero básico muriera en junio producto de un cuadro de influenza.

En total se habrían realizado 668 inoculaciones durante dos fines de semana, a estudiantes, profesores y funcionarios. La profesional fue acusada además de no contar con las dosis necesarias. Incluso, al parecer en total cinco colegios habrían pasado por la misma situación, por lo que podría haber más afectados.

La seremi Rosa Oyarce sostuvo que la investigación quedó a cargo del equipo de epidemiología, que visitó hoy el colegio. Además, explicó que si bien se ha hecho seguimiento a los vacunados, síntomas de posibles enfermedades podrían verse recién días después.

En este contexto, desde este lunes hay un plazo de siete días para que se conozcan los resultados de esta investigación sanitaria. Por el momento, si bien desde la Seremi llamaron a la calma, pidieron monitorear el estado de las personas vacunadas, considerando que los plazos de incubación de enfermedades puede ser de hasta seis meses.