Un inédito caso de abandono de una persona desvalida quedó al descubierto en Talca. El hecho quedó en evidencia luego que vecinos de la Población Manso de Velasco llamaran una ambulancia del SAMU para auxiliar a la víctima y uno de sus hijos, también afectado.

Se trata de una mujer de 70 años, quien se encontraba en el suelo de la casa, en deplorables condiciones sanitarias y muy debilitada.

En tanto, el hijo que la acompañaba, de 36 años, permanece postrado debido a una enfermedad mental.

La mujer fue estabilizada y luego derivada de urgencia al hospital, donde se encuentra en condición de riesgo vital, según confirmó la fiscal Gabriela Vargas.

El caso motivó una rápida investigación a cargo de la Fiscalía y personal de Carabineros que, a las pocas horas, derivó en la detención de otro de los hijos de la víctima, por abandono.

Ricardo Antonio Martínez fue formalizado en el Juzgado de Garantía de Talca y pese a que la defensa negó que se tratara de abandono, la jueza Marta Asiaín determinó prisión preventiva para el detenido.

“Carabineros llegó al domicilio de la víctima junto con personal del SAMU. Se encontró a la madre del imputado y a un hermano en condición de abandono, con lesiones de carácter grave. Fue formalizado por el delito de abandono de ascendiente, en este caso su madre, y también a su hermano que se encontraba postrado”, explicó el fiscal, Marcelo Albornoz.

Defensa rechaza abandono

En la audiencia, la defensa del imputado, ejercida por la abogada Alexandra Acevedo, de la Defensoría Penal Pública, rechazó que a Martínez se le formalizara por el delito de abandono a ascendiente, porque según los testimonios recogidos entre parientes, el hijo aparentemente cuidaba de su madre, pero ella solía ser agresiva y se habría negado a recibir ayuda. Además, resaltó la defensora, la mujer adulta mayor no estaba postrada.

“Era demasiado agresiva. Yo la iba a ver a la casa y ‘pescaba’ el bastón y me pegaba. Ella no dejaba a nadie entrar a la casa ¿Cómo la íbamos a ayudar? Fuimos a la municipalidad, a distintas partes a pedir ayuda y nadie nos abrió las puertas. Ricardo tiene su pareja y sus hijos. Entonces, cómo la iba a poder cuidar si tenía que salir a trabajar”, argumentó Ricardo Martínez Gacitúa, tío del imputado.

Por otro lado, la defensa acusó a las instituciones públicas de no haber atendido los llamados tanto del hijo, como de otros parientes, en búsqueda de atención para la mujer. Estos elementos son parte de la investigación, aseguró el fiscal. No obstante, más allá de las acciones del sistema público, subrayó la responsabilidad que recae en el hijo en primer lugar.

“Es evidente que, como dijo la magistrada, que hay una situación social también, pero la ley establece que la responsabilidad primordial es la del pariente, independiente de que la sociedad o los servicios públicos deben tomar cartas en el asunto, la primera responsabilidad es de los parientes o personas cercanas”, dijo Albornoz.