La gran adicción a la comida chatarra de Molly Smith la llevó a pesar más de 100 kilos en poco tiempo, siendo este un llamado de atención para la estudiante canadiense de sólo 24 años.

Su poca confianza e inseguridades la llevaron a tomar la decisión más difícil de su vida: un cambio radical para ser una mujer saludable y feliz, dejando de lado todos esos ‘caprichos’.

Además, la joven sueña con encontrar el amor, sin embargo, está segura que si no se quiere a sí misma primero nadie será capaz de amarla como espera.

Estaba tan deprimida e insegura. Estar sobrepeso es mucho más que un desafío físico, también es mental“, señaló al diario británico Mirror.

La joven comentó que comenzó por hacer una intensa dieta cortando drásticamente las grandes cantidades de calorías que consumía antes. Y aunque en un principio aceptó que fue sumamente difícil -porque sentía hambre a cada instante- su deseo por bajar de peso fue más fuerte.

Comencé a comer 1.200 calorías diarias en comida fresca y saludable, evitando los carbohidratos“, puntualizó y agregó que también se ejercita todos los días por al menos una hora. “La constancia me llevó a ser lo que soy”, comentó.



Tras meses de esfuerzos y constancia, logró bajar más de 40 kilos
. “Perder peso cambió totalmente mi vida. Dejé atrás mis problemas de confianza y me encontré a mí misma en un cuerpo mucho más sano”, dijo.

Finalmente, la joven quiso compartir un inspirador mensaje para sus miles de seguidoras en Instagram, con quienes compartió su larga experiencia: “A todas las personas les cuesta bajar de peso. Es difícil porque si fuera fácil todos tendrían un cuerpo perfecto. Pero lo importante es que tú no te des por vencida y sigas hasta lograr tus objetivos“.