Los cómicos videos de Erwin Padilla que lo hicieron viral antes de llegar al Festival de Olmué

A fines de septiembre, Erwin Padilla se dio a conocer en el primer capítulo de Coliseo, donde conquistó no solo al público, sino también a todo el jurado con su divertida rutina.

Y aunque avanzó con éxito en el programa de Mega, lo cierto es que llegó una oferta que no pudo rechazar, y que lo llevó a renunciar a su participación en el estelar que podía llevarlo a la Quinta Vergara.

A inicios de noviembre, el comediante fue confirmado como una de las cartas de humor para el Festival del Huaso de Olmué, y en diálogo con Página 7 reconoció que no era posible desaprovechar la oportunidad.

“En realidad no lo pensé tanto, o sea, salió Olmué y dije ‘sí, obvio’ altiro. O sea, Olmué llegó a mí por mi pega. Coliseo era una tremenda oportunidad y yo estoy súper agradecido de la plataforma, porque igual me mostró harto y me hice conocido para gente que no tenía idea de quién era yo”, dijo.

Sin embargo, quiso priorizar “una certeza sobre una incertidumbre”, destacado que, de todas maneras, es mejor hacer el camino primero en el Patagual y luego en el Festival de Viña del Mar.

“Sé que voy a llegar a Viña de alguna forma. Vamos a seguir trabajando, lo que tenga que demorar, así como se dio Olmué, creo que se puede dar Viña”, señaló esperanzado.

“Tengo un dicho que apunta a que las oportunidades están ahí, pero te tienen que encontrar trabajando. Entonces, cuando caigan, si me pillan en el ruedo, vamos a ver”, añadió.

Erwin Padilla cuenta cómo surgieron sus videos virales como “psicólogo”

Antes de que se supiera su salida de Coliseo y su llegada a la programación del Festival de Olmué, Erwin Padilla vivió una situación inesperada: uno de sus videos de comedia se viralizó a tal punto, que lo hizo traspasar fronteras.

A fines de octubre, subió un registro titulado ‘Yo de psicólogo’, donde recreaba una situación ficticia en la que recibía a su paciente -Valentina- y perdía la cabeza al escuchar que, tras meses de terapia, ella había decidido volver con su ex.

“Fue de esos aciertos que te encuentran así como de suerte, porque me comprometí a subir un cuatro videos a la semana siempre, y ese día no tenía video”, confesó en la entrevista.

Como estaba con su amigo Claudio Merlin, le pidió que lo ayudara a grabar esta idea que, según él, la tenía un poco en el aire.

“Si sale, sale, y si no, no, pero era para cumplirle al algoritmo, ¿cachái? Y no pensé que iba a pegar de la manera en la que pegó”, dijo sorprendido.

@erwinpadillasaez Mándaselo a tu Valentina… #fyp #chile #reels ♬ sonido original – Erwin Padilla

La loca terapia de Erwin Padilla

“Es una locura. Me han escrito de Lima, de Argentina, de Colombia… En Chile quieren que haga videos con sus nombres y me mandan sus historias. Algunos que me dicen ‘oye, me puedes dar un consejo’ y yo no soy psicólogo, pero bueno, si quieres un consejo, te lo doy igual”, agregó entre risas.

En Instagram, el primer registro tiene más de 3 millones de reproducciones, y suma otro medio millón en TikTok. A estas alturas, va en la quinta parte de esta saga donde se convierte en terapeuta.

“La otra vez me puteó una psicóloga y a los segundos me desputeó, porque me dijo ‘perdón, no sabía que eras comediante’. Yo no alcancé ni a escribir”, reconoció, detallando que lo trataron de “poco ético” antes de descubrir que solo era una humorada.

Tan lejos llegó este registro, que incluso lo invitaron a un evento de psicología: “Yo les dije ‘no soy psicólogo’ y fue como ‘ah, chuta’… Querían que presentara mi forma de trabajar”, reveló con una carcajada.

De todas maneras, Erwin Padilla se manifestó agradecido por lo que ha pasado con este video viral, que se masificó en las redes unos días antes del anuncio de Olmué.

“Lo estoy disfrutando, estoy creando, tengo hartos videos ya grabaditos que los voy a ir soltando. Pretendo sacar uno a la semana de eso, porque créeme que igual termino reventando después de grabar ese video“, explicó.

Lo anterior, porque su papel en la parodia no para de gritarles a los pacientes. “Eso me deja como abombado. Ni me imagino cómo será para los psicólogos de verdad”, cerró con humor.