Muere a los 18 años Isabelle Marciniak, promesa de la gimnasia rítmica brasileña
La gimnasia rítmica brasileña vive horas de profundo pesar, tras la muerte de Isabelle Marciniak, joven promesa del deporte y campeona brasileña juvenil en 2021. La deportista falleció el pasado miércoles a los 18 años, según confirmó la Federación Paranaense de Gimnasia.
De acuerdo con la información entregada por la federación y recogida por medios locales, Marciniak enfrentó la enfermedad de Hodgkin, un tipo de cáncer que afecta al sistema linfático.
La noticia generó conmoción en el ambiente deportivo, donde su nombre se asociaba a talento, proyección y disciplina.
Pese a su corta edad, Isabelle ya acumulaba importantes títulos a nivel regional y nacional. En su estado natal de Paraná, al sur de Brasil, destacó como una de las figuras más prometedoras de la gimnasia rítmica.
En 2021 alcanzó uno de los hitos más relevantes de su carrera al ganar la medalla de oro en el concurso completo del Campeonato Brasileño juvenil, además de sumar una plata en la prueba con cinta y otro primer lugar en la modalidad con pelota.
Su proyección continuó en los años siguientes. En 2023 celebró uno de sus últimos éxitos deportivos al coronarse campeona junto al trío adulto del Club Agir de Curitiba, equipo del que formaba parte y donde consolidó su crecimiento competitivo.
La despedida para Marciniak y el mensaje de la federación
El cuerpo de la joven gimnasta será velado este jueves en Araucária, su ciudad natal, ubicada en la región metropolitana de Curitiba, donde también se realizará su sepultura.
Desde la Federación Paranaense de Gimnasia expresaron públicamente su pesar y enviaron un mensaje de apoyo a su entorno cercano. “En este momento de dolor, expresamos nuestra solidaridad con familiares, amigos, compañeras de equipo, entrenadores y toda la comunidad de la gimnasia”, señalaron.
Además, destacaron su legado: “Que su historia, su pasión por el deporte y su recuerdo permanezcan vivos como inspiración para todos los que creen en la gimnasia como una herramienta de formación humana y transformación”.
La partida de Isabelle Marciniak deja un profundo vacío en la gimnasia rítmica brasileña y un recuerdo imborrable entre quienes compartieron con ella dentro y fuera del deporte.