Diputado Diego Schalper detalla cómo logró bajar 30 kilos: llegó a pesar 120

Después de cerca de un año de cambios de rutina y alimentación, el diputado Diego Shalper hoy luce totalmente distinto, pues pasó de pesar 120 kilos, a 90.

En entrevista con LUN, el secretario general de RN contó que su sobrepeso lo hacía sentir cansado.

“Por ejemplo, cuando subía escaleras me sentía ahogado. Había ropa que no cabía, lo que era un desagrado porque cuando uno quería ponerse ternos que había usado siempre ya no estaban cerrando”, declaró al medio.

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Justamente un día que subió una escalera larga en el Congreso, y quedó agotado, decidió cambiar sus hábitos.

Retomó la pauta que le dio una nutricionista que había consultado: “Decidí hacer una especie de ayuno intermitente acompañado de una dieta muy marcada en proteínas. Eliminé prácticamente todos los carbohidratos y dejé de comer las porciones que comía”.

“Antes comía carnes magras, pero tuve que radicarme en el pollo como comida principal y en el pescado. Es difícil al día a día, pero hay que hacer una dieta muy cargada a las carnes blancas”, detalló Schalper.

Su cambio también incluyó dejar “la comida chatarra y comida a deshoras. También con el alcohol. A mí me gusta mucho la cerveza. Si antes te tomabas un schop de medio litro, ahora tienes que tomar un schop de 300 (mm)”.

Diego Schalper sumó ejercicio a su cambio de hábito

El parlamentario comenzó a hacer deporte “cinco veces a la semana y de la manera más versátil posible. Lo que hago es trotar dos días y otros días hago gimnasio. Hago ejercicios sin pesas, sino que me exijo contra mi propio peso”.

Junto con ello, también está jugando tenis y pádel: “Espero cuando logre mejorarme de la rodilla, retomar el fútbol. Esto no son rutinas de dos horas. Con 40 minutos diarios de deporte inmediatamente el cuerpo comienza a cambiar su metabolismo”.

Con respecto a su rutina, contó al medio que “lo que hago es dejar a mis niños temprano en el colegio y después hago deporte”.

“Esto fue una conversación seria con mi señora. Por suerte yo no tenía una enfermedad relevante, pero cuando eres padre y tienes tres hijos, obviamente te empiezas a preocupar para no estar dentro de una población de riesgo. Entonces lo conversamos y le pedí su apoyo, sobre todo con el tema de las comidas”, detalló.

Con respecto a lo que más le ha costado dejar, lo primero que dijo fue asados: “Soy parrillero, ese ha sido un cambio muy importante”.

Pero no fue lo único: “Mi familia materna es alemana inmigrante. Yo soy muy cargado a lo que son los dulces de manzana: al strüdel de manzana, el küchen de manzana. Todo eso se acabó, ahora me como la manzana nomás”, comentó entre risas.

Y notó el cambio enseguida: “Uno se siente mejor en todo sentido. Te sientes más activo, con más energía, más dinámico. O sea, te sientes más cómodo con tu propio cuerpo, y eso es una cuestión súper importante. Ahora puedes subir una escalera y no es tema que vayas a transpirar, o ya no es tema de si va a entrar o no en el pantalón”.

Finalmente, compartió una anécdota tras este cambio: “Me han encontrado un parecido con Luis Miguel, que no sé si será verdad. Hace poco una señora del Congreso, que nos ayuda en la parte de la comida, dijo que estaba igual a Luis Miguel”.