El actor que encarnó a Harry Potter en la saga de las películas del mismo nombre, Daniel Radcliffe, admitió por redes que sufre una extraña enfermedad que ha padecido gran parte de su vida.

El actor confesó hace un tiempo que sufre dispraxia, un trastorno que provoca que no se desarrollen de forma correcta las habilidades motoras. También esta enfermedad es conocida como ‘el síndrome del niño torpe’, ya que produce una desorganización de los movimientos del cuerpo.

A sus 27 años, Daniel confesó que pese a que usualmente tiene problemas para escribir o para atarse sus cordones, no tiene inconvenientes en asumir su condición.

Por esto mismo, es que se muestra en sociedad como un ejemplo para quienes sufren esta patología, y además, para que así las personas puedan conocer más de esta extraña enfermedad.

“A mí nunca me detuvo; y algunas de las personas más inteligentes que conozco tienen discapacidades de aprendizaje. El hecho de que algunas cosas nos resulten más difíciles solo hará que seas más determinado, que te esfuerces más y que seas más imaginativo para encontrar soluciones a los problemas”, confesó el actor en sus redes sociales.

Quienes padecen esta enfermedad se caracterizan por tener dificultades para realizar movimientos que son aparentemente sencillos, como peinarse, escribir o hacer deportes. También este trastorno afecta las habilidades sociales de la persona, pero Daniel ha sido un claro ejemplo de que se puede tener una vida normal con dispraxia.