Jennifer Velardi, de 33 años, decidió cambiar su vida radicalmente tras ser abandonada por su esposo después de unas vacaciones, donde con un sólo mail le comentó que jamás volvería a casa.
Fue en ese instante que la mujer de Toronto, Canadá, quiso bajar de peso para comenzar una nueva vida: feliz y saludable.
Su problema alimenticio comenzó tras la muerte de su madre, pues Jennifer comía como una forma de llenar el vacío que esa importante pérdida le había dejado en su corazón, llegando a pesar unos 108 kilos en poco tiempo.
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Lo primero que hizo fue cambiar su dieta, comenzando a comer de forma más saludable y limitó su cantidad de calorías, además añadió una intensa rutina de ejercicios a su día a día. En unos años llegó a un saludable peso de 62 kilos.
“Quería perder peso porque estaba aburrida de esperar a un héroe que llegara y salvara mi día. Comencé a subir de peso el año 2011 cuando mi madre decidió quitarse la vida y mi esposo en vez de apoyarme se comenzó a alejar de mí”, señaló al diario británico Daily Mail.
A esto agregó: “Mi matrimonio era muy complicado. Yo estaba pasando por un momento emocional muy difícil, estaba deprimida y mi peso cada vez aumentaba más. Cada día nuestra relación empeoraba”.
De acuerdo a lo relatado por Jennifer, su marido sólo se burlaba de ella y de sus constantes intentos para bajar de peso, es por eso que cuando el hombre la dejó ella le quiso demostrar que sí era capaz de eliminar todos esos kilos de más que tanto le causaban ‘risa’.
En 2016, la mujer se sometió a una abdominoplastía para extirpar toda esa piel sobrante que le había quedado tras bajar considerablemente de peso.
Cabe señalar que actualmente, la canadiense comenzará un nuevo proyecto para ayudar a las mujeres a vivir un estilo de vida saludable y feliz al igual que ella.
A continuación, te dejamos más imágenes de su cambio.