Caly Bevier sabía que algo estaba mal con su cuerpo cuando repentinamente comenzó a vomitar y a sentir intensos dolores en todas partes.
Tras la persistencias de las molestias, la joven decidió visitar a diferentes médicos, quienes sólo le dijeron que se trataba de un simple embarazo, ‘nada grave’.
Sin embargo, Bevier sabía que ese no era el caso, por lo que insistió en que necesitaba exámenes para poder verificar que nada grave estaba pasando con ella.
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Después de ver los resultados de los exámenes, los médicos descubrieron que tenía un gran tumor (2 kilos) en uno de sus ovarios y que se encontraba en su tercera etapa.
De acuerdo a Daily Mail, Caly comenzó inmediatamente un intenso tratamiento de quimioterapia para eliminar todas las células cancerígenas que tenía en su cuerpo.
“Tenía un tumor creciendo en mi ovario durante un año y sólo lo ignoré. Jamás pensé en eso porque no era un problema en un comienzo“, dijo a People según la información recopilada por el diario británico.
Tras su tratamiento, los doctores le extirparon su ovario izquierdo y parte de sus trompas de falopio para eliminar completamente el tumor. “Siempre me decía a mí misma que tenía que ser positiva, que todo iba a mejorar”, señaló.
A esto agregó: “Cuando pasas por algo tan grave te das cuenta en la importancia de los pequeños detalles. Esto sin duda que me cambió”.
Actualmente, la joven está sana y utiliza sus redes sociales para hacer un llamado de atención a las personas y sobre todo mujeres sobre el cáncer de ovario, pues su intención es hacer conciencia en las demás personas sobre este tipo de cáncer.
Cabe señalar que de acuerdo a la Sociedad Americana del Cáncer, las muertes por cáncer de ovario son una de las más comunes entre las mujeres que sufren de este tipo de enfermedades.
