Una joven madre inglesa dio a luz mientras se recuperaba de una resaca, producto de una jornada de fiesta la noche anterior.

Abigail Avery, de 24 años, no sabía que estaba embarazada por lo que decidió salir con unos amigos a beber unas copas la noche anterior a dar a luz a su hija, Isabella, hace cuatro meses atrás.

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Curiosamente Abigail se cuidaba con pastillas anticonceptivas y siguió teniendo periodos menstruales hasta el día antes en que su hija nació. Esa mañana, la joven experimentó dolores en su estómago pero ella los atribuyó a una infección urinaria y se fue a descansar hasta que su novio, Jamie Pillinger, de 37 años, llegó a casa.

Avery, oriunda de la ciudad de Wolverhampton, le comentó a su pareja que algo andaba mal pero no fue hasta que comenzó a sentir que el dolor se presentaba de manera intermitente y que sus órganos iban a “explotar”, que decidió ir al hospital. Pese a su estado, la mujer jamás sospechó que estaba en trabajo de parto.

Finalmente, se programó una cesárea de emergencia, debido al estrés que experimentaban la madre y el bebé, sin embargo, Abigail dio a luz por su propia cuenta tras apenas tres pujos. La bebé nació sana pero solo con 35 semanas y pesando dos kilos, por lo que tuvo que permanecer varios días en cuidados intensivos neonatales.

Cabe señalar que durante los meses de gestación de Isabella, su madre había sentido dolores en su estómago y se levantaba muchas veces a orinar, pero ella lo atribuía a una infección de la vejiga.

Tras dar a luz llamó a su madre quien también estaba sorprendida pero al mismo tiempo feliz por la noticia. Lo único que tiene apenada a Abigail, es el hecho de haber bebido alcohol durante su embarazo. “Definitivamente no hubiese bebido alcohol si hubiese sabido que estaba embarazada. Me siento muy culpable. No puedo creer que pensara que una resaca era en verdad mi hija Isabella“, agregó.